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Autor Tema: Empresa privada...  (Leído 374 veces)

OCIN

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Empresa privada...
« en: Enero 05, 2010, 10:27:23 am »
Por... Hernán González Rodrí­guez

El descríédito actual de la empresa privada en casi todos los paí­ses de la Tierra proviene, sin lugar a duda, del descríédito de tales organizaciones en el paí­s donde más florecientes han sido íéstas, los Estados Unidos.

Tal descríédito no sorprende a casi nadie y en gran parte se atribuye a los banqueros que prestaron en forma imprudente, a las empresas calificadores de riesgo que recomendaron tales imprudencias, a los legisladores y gobernantes que toleraron esas estupideces y a las juntas directivas que aprobaron cuantiosas bonificaciones para sus codiciosos ejecutivos, independientemente de que sí­ obtuvieran a la par resultados satisfactorios para sus accionistas.

Sin embargo, de cuando en cuando se publican artí­culos muy convincentes en defensa de la iniciativa privada. En alguno de ellos se afirma que la inmensa mayorí­a de los empresarios estadounidenses no incurrió en tales prácticas. Que los principales criminales tanto del sector financiero, como The Wall Street, Enron, WorldCom, Tyco, Countrywide... pasaron y siguen pasando de las primeras páginas de los medios a una frí­a celda en algún penal.
 
El argumento que más convence a quien escribe estriba en reconocer que las empresas privadas de los paí­ses ricos sí­ han contribuido en forma inapreciable al progreso y al bienestar de la humanidad. La aviación, la radio, las comunicaciones de todo tipo, los automóviles, la televisión    , las computadoras, los telíéfonos celulares, los avances en la medicina, las drogas tradicionales y las nuevas que promete la geníética, la creación de grandes organizaciones para inventar, producir y mercadear por doquiera con personal de todos los rincones del planeta...
 
Desconocer todo lo anterior, y mucho más, resulta ser lamentable, injusto, porque la mayorí­a de los crí­ticos desconocen tal creatividad y centran su debate en la codicia, la irresponsabilidad, los monopolios y los abusos de algunos pocos.
 
Olvidan íéstos, por lo general, que las empresas se controlan a sí­ mismas, en los paí­ses donde los Estados mantienen a raya los grandes monopolios. Se argumenta que en Estados Unidos tan sólo existen a la fecha 200 de las 500 empresas más grandes en 1980. Olvidan con frecuencia, así­ mismo, que el monopolio es más un problema de actitud que de tamaño.
 
Ignoran íéstos, además, algo bien fundamental, cual es que, ante la ausencia o la nacionalización de las empresas privadas, emerge la peor de todas las opciones: El fracasado Estado empresario. En 1980 se consideraba que tan sólo el 40 por ciento de los paí­ses podí­an ser llamados democráticos, en este momento esa cifra se ha elevado al 80 por ciento, como consecuencia de la revolución de los negocios privados.
 
Y la  corrupción, frecuente tanto en las empresas privadas como en los estados totalitarios, se combate o tiene mayores posibilidades de ser controlada en una economí­a de empresas privadas que en una totalitaria.
 


•... “Todo el mundo quiere lo máximo, yo quiero lo mínimo, poder correr todos los días”...
 Pero nunca te saltes tus reglas. Nunca pierdas la disciplina. Nunca dejes ni tus operaciones, ni tu destino, ni las decisiones importantes de tu vida al azar, a la mera casualidad...