El mercado cree más arriesgado invertir en España que en sus multinacionales
Alberto Cañabate
Invertia.com
La percepción que el inversor tiene sobre España se ha deteriorado a marchas forzadas en los últimos meses. Del tal manera que cubrirse del riesgo de impago del país es más caro que en el caso de las grandes empresas como Santander, BBVA o Telefónica. La diversificación geográfica de las multinacionales y la transmisión del riesgo de lo privado a lo público durante la crisis explican este anómalo fenómeno, que no ocurre en países como Alemania, Francia o Reino Unido.
España cuenta con mejor calificación crediticia que todas las empresas con sede social en el país. Sólo S&P ha rebajado el rating nacional en un escalón desde el máximo posible, la triple A. Santander cuenta con doble A otorgada por la misma, por lo que está un escalón por debajo de España. Sin embargo, el mercado cree que España tiene más posibilidades de incurrir en impago que el banco que preside Emilio Botín.
El CDS (credit default swap) de España se sitúa en 115 puntos básicos (pb), frente a los 70 de Santander, BBVA, Telefónica o Repsol o los 60 de Gas Natural e Iberdrola. Los CDS son derivados que sirven para cubrir un impago del emisor de deuda, y se utilizan además como guía para calcular el tipo de interíés al que hay que emitir un bono. Cuanto mayor es el CDS de un emisor, más posibilidades de quiebra.
“Santander es una entidad global, no tiene la etiqueta de banco español, y a España la comparan con el resto de economías de Europa […] tiene la etiqueta de burbuja inmobiliaria y aquí no hemos sufrido nunca una crisis crediticiaâ€, dice Juan Ramón Caridad, socio de Atlas Capital. Otras grandes multinacionales como BBVA, Iberdrola o Repsol desarrollan su actividad en muchas otras áreas geográficas aparte de España.
“España tiene un problema de cuentas públicas conocido, con una fuerte reducción de ingresos y aumento de la deuda, por eso S&P nos puso en perspectiva negativa para en un plazo de dos años volver a revisarnos el ratingâ€, explica Natalia Aguirre, directora de análisis de Renta 4. “El Ibex sube un 70% desde mínimos a pesar de la mala situación económica, pero es que sus empresas tienen fuera la mayor parte del negocioâ€.
España, que durante seis meses ocupará la presidencia de la Unión Europea, está en este momento entre los grandes países de la región con peor percepción por parte del mercado. Según información recopilada en Bloomberg, el CDS de Alemania es de 27 pb, frente al 115 español, los 35 pb de Francia, los 81 pb de Reino Unido o los 99 pb de Italia. Grecia, aquejada de fuertes problemas fiscales, tiene un CDS de 280 pb.
El fenómeno que se produce en España, donde la nación tiene más riesgo de impago que sus empresas, se repite en otros países del sur de Europa como Italia o Portugal, pero sin embargo no es así en Alemania, Francia o Reino Unido, economías que gozan de mejor salud relativa y en las que los CDS soberanos están por debajo de los empresariales.
COMPRAR CDS EMPRESARIAL Y BONO SOBERANO
Juan Ramón Caridad, de Atlas, señala tambiíén que otra de las razones que explica la anomalía es la transmisión del riesgo de las empresas privadas a los países. Para evitar una hecatombe financiera, los estados tuvieron que aportar ingentes cantidades de capital a los bancos, respaldar emisiones de deuda e, incluso, nacionalizar con todas sus letras, como en los casos de Royal Bank of Scotland o Lloyd´s.
El experto de esta firma explica que una de las estrategias que están siguiendo los gestores es comprar CDS de una empresa y adquirir al tiempo el bono del país correspondiente. “Cuando se deje de intervenir la economía, el bono perderá menos de lo que suba el derivado […] si sube el riesgo país tambiíén lo hace el CDS y ganas dineroâ€, resume Caridad.
Los CDS soberanos son por lo tanto un vehículo que sirve para expresar visiones negativas sobre la recuperación económica. Al contrario de lo que pueda parecer, el mercado de estos derivados es mucho más líquido que el de la deuda soberana. Además, no se tiene que desembolsar el 100% de la inversión, como sucede con los bonos, lo que le convierte en muy atractivo para los inversores, según el experto.