¿El hazmerreír de Europa? Desde que el presidente del Gobierno, Josíé Luis Rodríguez Zapatero, asumiera la Presidencia de la Unión Europea - que durará hasta el próximo 30 de junio- su popularidad internacional se ha incrementado notablemente... para mal.
De hecho, las publicaciones más importantes tanto de Europa como a nivel internacional le dedican cada vez más páginas. La semana pasada la revista económica The Economist, así como el Financial Times dieron una lección económica y de credibilidad al presidente del Gobierno español. Y ayer fue el turno de The Wall Street Journal.
El diario neoyorquino dedicó su editorial a la estrategia económica que Rodríguez Zapatero va a impulsar en la Unión Europea. El comienzo del artículo resume la ironía de la que se nutre todo el texto: "España ha dado con una ingeniosa solución para reflotar la economía: hacerla ilegal".
La explicación con la que Zapatero quiso anunciar cuál sería su actuación al frente de la UE y cómo iba a impulsar la nueva Estrategia de Lisboa le ha costado más de una mofa. "La semana pasada España propuso que los países miembros de la Unión Europea debían cumplir ciertos retos y se conseguirían con penalties para los que no alcancen los objetivos de crecimiento y de competitividad. ¿Por quíé no se nos había ocurrido antes a nosotros?".
La Estrategia de Lisboa, con la que la Unión Europea intentaba alcanzar un máximo de competitividad antes de 2010, no cumplió su objetivo. Y para Zapatero, "el problema se encuentra en que los objetivos de la Agenda de Lisboa no eran obligatorios". Así que "Zapatero instó a que los representantes de los países miembros de la Unión Europea discutan durante el próximo mes los incentivos y las medidas correctivas que se tienen que llevar a cabo para alcanzar estos objetivos. Sin embargo, en la rueda de prensa, el presidente insistió a los periodistas para que no las denominasen sanciones".
The Wall Strett Journal defendió a la Unión Europea de los ataques vertidos por Zapatero, culpándola de ser poco firme en sus políticas económicas, diciendo que "el obstáculo de la competitividad europea nunca ha sido la falta de regulación, sólo hay que pensar en el Tratado de Maastricht, o en falta de ambición". "De hecho, el mercado único de la Unión Europea ha hecho más por Europa que cualquier otra medida, mejorando el dinamismo económico de los países miembros de la UE".