Sin duda, la noticia de ayer fue la amenaza de Google de abandonar China por los ataques sufridos y la censura que le impide desarrollar su negocio. Se publicaron interpretaciones de todo tipo, desde las que consideran que el buscador se está suicidando al renunciar al mercado de mayor crecimiento del mundo hasta las que alaban su heroísmo por decir lo que las demás empresas callan por temor a perder su posición en el país. Pero más allá, el gran ganador de esta batalla puede ser... Apple.
Así lo cree Jim Goldman, autor del blog 'Tech Check' en CNBC. Parte de lo que evidencia la actitud de todas las empresas presentes en China menos Google (GOOG.NQGOOGLE
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Google could find new road in China
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resumen noticias perfil gráficos histórico ): el Gobierno chino no perdona y puede ser muy vengativo. Aunque la amenaza de Google tiene un riesgo económico muy limitado por el escaso peso de China en el negocio de buscador, puede tener un gran impacto en el desarrollo de una de las principales iniciativas para diversificar su negocio: el sistema operativo para móviles Android.
Aunque el flamante móvil de Google, el Nexus One, no ha llegado a China (ni a España), compañías como Motorola o Samsung están lanzando móviles en ese país con el sistema Android. Y tiene sentido, según Goldman, que si Google irrita lo suficiente a la maquinaria política china, íésta sancionará cualquier cosa que tenga la huella de Google.
"¿Es realista pensar que China puede imponer algún tipo de restricciones de acceso a los telíéfonos con software de Google? Sin ninguna duda, afirman los expertos con los que he hablado", responde Goldman.
Por tanto, podemos ver un escenario en que las dos grandes empresas de telefonía móvil chinas traten de vender telíéfonos basados en otras plataformas distintas de Android, y el candidato más claro es el iPhone. De hecho, Apple ya ha comenzado a comercializar su telíéfono en el país desde el 30 de octubre, y Steve Jobs considera a China un mercado crítico para su empresa. Y lo mismo sucede con Research in Motion, que acaba de anunciar la entrada de la Blackberry en China.
La cuestión es que hay cientos de millones de potenciales usuarios de smartphones en China, y la mayoría de los fabricantes consideran crucial estar allí. "Pero los fabricantes que basen sus aparatos en Android pueden no conseguir el íéxito y la penetración que planeaban, en función de la escalada entre Google y el Gobierno", concluye este experto.
Además, se muestra convencido de que China puede hacer lo que quiera para vengarse de Google y que las presiones internacionales tendrían muy poco íéxito. A su juicio, la xenofobia y el odio hacia ciertos aspectos de la cultura norteamericana (en especial los medios de comunicación e Internet) permiten que el Gobierno extienda sin problemas las represalias hacia otras empresas que hacen negocios con Google, como las citadas Samsung y Motorola. "Y con 800.000 millones de dólares invertidos en bonos del Tesoro, China puede hacer básicamente lo que quiera dentro de los muros de su país, y hay muy pocos recursos para los que quieran oponerse", concluye.