El Gobierno quiere elevar en diez años, hasta los veinticinco, el periodo de cotización que se considera para calcular las pensiones. Así consta en la actualización del Programa de Estabilidad 2009-2013 que el Ejecutivo ha remitido a la Comisión Europea y en la que esta medida se incluye como una de las posibilidad para reducir el gasto público.
Según el documento, si durante la díécada de 2020 se eleva en dos años la edad de jubilación, hasta los 67, y se aumenta en diez el periodo de cálculo de las pensiones se podría alcanzar un ahorro en el gasto para pensiones de cuatro puntos del PIB a partir de 2030.