Un tercio de los profesionales que hay en Míéxico tiene que emplearse en actividades ajenas a su formación, dedicarse al comercio informal o emigrar a Estados Unidos, revela un estudio de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
“Los maestros y los investigadores son los profesionales más mal pagados del país, cuando la educación es la única acción transformadora de la sociedadâ€, dijo Alberto Jimíénez Merino, coordinador de los diputados federales de la central campesina.
Hace unos días la Secretaría de Educación Pública (SEP) informó que cuatro de cada diez profesionales en Míéxico trabaja en una actividad que no está ligada a la carrera que estudió, El año pasado la crisis económica dejó sin empleo a más de 400,000 profesionales. Así, 14% de los antropólogos, arqueólogos y etnólogos acabaron laborando como taxistas o vigilantes.
Alberto Jimíénez Merino sostuvo que actualmente “nadie sabe, y los diputados menosâ€, cuántos profesionales se tiene en cada área y cuántos faltan de acuerdo con la actividades económicas predominantes y a sus tendencias.
“Independientemente de la urgencia de aumentar la inversión, reactivar la economía, aumentar los presupuestos y todas las medidas económicas que conocemos, es más trascendente revisar no sólo la calidad de la educación, sino los contenidos de lo que se está enseñandoâ€.