El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, ratificó una normativa para confiscar la mayoría de la propiedad de las empresas de blancos y extranjeros instaladas en el país, informaron hoy los medios oficiales.
La nueva normativa, acogida a la Ley de Indigenización de la economía promovida por el ríégimen de Mugabe, ha sido inmediatamente calificada de "nula y sin valor" por el primer ministro, Morgan Tsvangirai, socio de Gobierno del presidente desde hace un año, en el que el Ejecutivo no ha conseguido trabajar en armonía.
Todas las empresas con un capital de más de 500.000 dólares existentes en el país se deben registrar antes del 1 de marzo y declarar quienes son sus propietarios, señala hoy el periódico oficial "The Herald".
"Los negocios que no cumplan con el 51 por ciento de capital indigenizado deberán presentar, en un plazo máximo de 45 días a partir del 1 de marzo, un plan para cumplir con esa exigencia", recalca el periódico, controlado por la Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF), el partido de Mugabe.
Las compañías podrán tener un plazo de cinco años para ceder la mayoría del capital a socios negros, según la Ley de Indigenización, cuyas bases aprobó el ríégimen de Mugabe hace dos años, cuando la ZANU-PF contaba con mayoría parlamentaria, y que ahora se pretende desarrollar.
Bancos, empresas mineras y compañías comerciales y diversos tipos de negocios se pueden ver afectados por esta legislación, de la que se ha advertido que puede llevar a la eliminación de las inversiones extranjeras en el país. EFE