Por... JOANNA OSSINGER
Esperaban mal tiempo para el noreste y los bares de Manhattan podían salir beneficiados.
Algunos operadores de Wall Street que llegaron el miíércoles al trabajo abrigaban la esperanza de no poder regresar a casa.
Las advertencias meteorológicas de una nevada de hasta 20 pulgadas (50 centímetros) hizo que firmas como Jefferies & Co., con sede en Nueva York, reservaran habitaciones en hoteles de Manhattan a modo de precaución en caso de que algunos empleados no puedan volver a sus casas. Esto es una buena noticia para operadores de bolsa que acogen con beneplácito una noche en las tabernas.
"Los bares y restaurantes se benefician de los temporales'', dijo Doreen Mogavero, directora general y jefa ejecutiva de Mogavero Lee & Co., una correduría ubicada en Broad Street en Manhattan. Mogavero planea pasar la noche en la ciudad. "Siempre logramos sacarle el mejor provecho y pasarla bien: buenos amigos, alguna cena y una copa de vino en una esplíéndida ventisca''.
La negociación de títulos valores mermó a 3.100 millones de acciones en las primeras dos horas de jornada bursátil hoy, una caída de 15 por ciento con respecto al promedio de los últimos cinco días, según se intensificó la tormenta de nieve en la costa este de Estados Unidos, causando la cancelación de miles de vuelos y obligando al cierre de escuelas y dependencias gubernamentales. El ferrocarril de Long Island, el medio de transporte de pasajeros más usado de Estados Unidos, dijo que añadiría trenes por la tarde para los trabajadores que regresen más temprano a sus hogares.
"Se llama whiskey de la nieve: uno sabe que no puede salir, por lo cual lo usa como excusa para quedarse un rato'', dijo Kevin Joyce, socio de Kellogg Partners Institutional Services LLC en Nueva York. ``Estoy esperando a ver quíé pasa''.