Una batería de móvil que dura un mes, será la estrella del encuentro tecnológico de Barcelona
Samsung presentará en la feria de Barcelona una gama de telíéfonos con autonomía de casi un mes. Se esperan 50.000 profesionales en la feria de las telecomunicaciones más importante del año.
Llega la batería de móvil que dura un mes. El anuncio prevíé realizarlo Samsung la próxima semana y su impacto eclipsará al resto de las innovaciones que desfilarán los próximos días por el Mobile World Congress de Barcelona (MWC). La feria de las telecomunicaciones más importante del año tiene ganas de encontrar la vacuna capaz de alargar la vida de todos los dispositivos portátiles, y todo apunta a que ese día está a la vuelta de la esquina.
La duración de las baterías es la pesadilla que inquieta a gran parte de la industria tecnológica de consumo y la empresa que comercialice la patente se hará de oro, ya que los enchufes dejarán de ser tan perentorios.
Los principales fabricantes de telefonía móvil están trabajando con baterías capaces de disfrutar de autonomía de entre 20 y 30 días, pero Samsung lleva la delantera. El departamento de I+D del fabricante coreano lleva muchos años detrás de este tipo de prestaciones y parece que, en breve, podrían revolucionar el mercado con un producto que marcará un hito en el sector. Para conseguir esta proeza, Samsung no sólo ha afinado al máximo las prestaciones de la batería, sino que tambiíén ha trabajado con el sistema operativo de los dispositivos y la optimización de los elementos gráficos, así como el resto de los componentes. En la actualidad, las pilas de los telíéfonos inteligentes (smarphones) de todos los fabricantes apenas prolongan su plena actividad durante 24 horas.
El anuncio de la batería eterna animará una feria cuyo ambiente está caldeado, muy caldeado. Se viven momentos convulsos en los que sólo las compañías más aguerridas se atreven a sacar pecho. En medio de las dificultades del entorno, el sector de las telecos se siente capacitado para tirar del carro en esta crisis. Quien quiera comprobarlo sobre el terreno sólo tiene que pasearse por el MWC, donde la Fira de Barcelona se erigirá en el centro neurálgico de las nuevas tecnologías. Está todo listo para que el recinto se transforme en un hervidero de 1.300 stands, por donde pulularán más de 50.000 profesionales de 180 países diferentes.
La tensión entre los gigantes tambiíén flota en el ambiente. Google y Apple andan a la gresca, mientras que Nokia y Microsoft velan sus armas para irrumpir en una batalla de todos contra todos. Los fabricantes asiáticos (Samsung, LG, HTC, Huawei, Sony Ericsson) llevan la voz cantante en materia tecnológica, mientras que los viejos rockeros como Motorola y BlackBerry no se resignan a asumir un papel secundario. Eso nunca.
Los operadores de telefonía escrutan sus magnitudes contables, sus niveles de endeudamiento, conscientes de que se avecina una etapa de grandes compras que cambiará el actual orden establecido. Sólo triunfarán en el mercado global aquellos que sean capaces de generar sinergias. Telefónica y Vodafone parten con ventaja sobre el resto, dado el volumen de clientes y la diversidad geográfica de sus actividades.
Fusiones en el horizonte
Telefónica y Telecom Italia ultiman sus nupcias, mientras que France Tíélíécom y T-Mobile sueñan con extender su noviazgo en el Reino Unido al resto de sus mercados. Los gigantes chinos no se conforman con la inmensidad de sus territorios y amenazan con dar el salto a otros continentes. Los operadores de telecomunicaciones de clase media deben mirarse al espejo y decidir si prefieren combatir en solitario o en alianza con otros iguales. Al otro lado del Atlántico acecha Amíérica Móvil, propiedad del magnate Carlos Slim, siempre dispuesto a hacer las maletas para hacer negocios en Europa con empresas en situaciones críticas.
¿Quiíén dijo crisis?
Las telecos llevan mucho tiempo reivindicando su eficaz contribución como motor de desarrollo para salir de la crisis, y ahora toca pregonar con el ejemplo. Por el contrario, las mismas compañías indican que la presión impositiva que sufren por parte de los reguladores puede volverse en contra de todos. Por ese motivo, en los foros de discusión del MWC se incidirá en rebajar la presión fiscal para salir cuanto antes del atolladero.
Todos contra Google
Por si fuera poco, Google flirtea ahora en los Estados Unidos como proveedor de fibra óptica. Más tarde hará lo mismo con la banda ancha móvil con el espectro que dejarán vacantes las televisiones analógicas. Estos movimientos moverán los cimientos de las telecos tradicionales, que ven peligrar su negocio. El advenedizo de Mountain View no será bienvenido por el resto de sus competidores. Su sistema operativo Android ha sido el último en llegar, pero en meses ha conseguido hacerse un hueco respetable. La industria asume que Internet se meterá muy pronto en el bolsillo de los ciudadanos del Primer Mundo. Cuando llegue ese momento, conviene tener dispositivos capaces de acceder a la banda ancha inalámbrica como el que enciende una luz. Esa sensibilidad es que la que mueve a las compañías con vocación de sobrevivir en la nueva era de acceso libre e inmediato a Internet.
La banda ancha es la reina
Todas las grandes compañías tecnológicas se verán las caras en la mayor feria de las telecomunicaciones del mundo, donde cada uno exhibirá lo mejor de cada casa. Existe unanimidad en sector en que las prestaciones de la banda ancha en movilidad no tienen nada que envidiar a las de la fibra óptica, con velocidades en la transmisión de datos de más de cien megas. Esta conectividad superlativa llegará a los usuarios tanto por fibra, cuyos costosos planes de inversión traen a los operadores de cabeza, como por las nuevas tecnologías inalámbricas, desde el LTE (Long Term Evolution), al renacido Wimax, pasando por las evoluciones del HSPA.
Frecuencias de 2,6 Ghz
Todo apunta a que los desarrollos de LTE se realizarán en Europa a travíés de las bandas de 2,6 GHz, que estos meses saldrán a concurso en la mayoría de los países del Viejo Continente. Los operadores están obligados a adquirir este tipo de frecuencias ya que así se lo exigirá la demanda creciente de la banda ancha móvil en las grandes ciudades. En los Estados Unidos, el LTE se implantará en las bandas de 700 y 800 MHz, que quedarán vacantes de las televisiones analógicas y cuyo radio de alcance es muy interesante para cubrir grandes extensiones e interiores de edificios.
Tiendas de aplicaciones
Los fabricantes han lanzado en los últimos meses sus respectivas tiendas de aplicaciones. Todos han comprendido que los márgenes comerciales de la venta de terminales cada vez son más exiguos, por lo que buscan nuevas fuentes de ingresos a travíés de los servicios. Apple abrió brecha con su iPhone, y su caso de íéxito ha sido imitado por el resto. Tambiíén los operadores se han subido al mismo tren, ya que incentivan el consumo de nuevos servicios ajenos a la voz, la mensajería y las comunicaciones, al tiempo que fomentan la contratación de tarifas planas. Lo que pierden por la voz lo ganan por los datos.
Redes sociales
Facebook acaba de superar los 100 millones de usuarios que acceden a la red social por el móvil. Tuenti trabaja a toda velocidad para llevar la exitosa experiencia del iPhones al resto de los dispositivos. Twitter crece exponencialmente desde el momento en el que sus usuarios pueden teclear sus microblogs, en cualquier lugar, sin las ataduras de los ordenadores. De todo lo anterior se desprende que el fenómeno de las redes sociales pueden convertirse en la killer application que buscaba la industria desde que descubrió el maná de los SMS.
