"Grecia recibió ayuda de Wall Street para ocultar su deuda". Rotundo titular de este fin de semana en The New York Times que no hace si no dificultar aún más un acuerdo europeo para rescatar a Atenas. Y es que los ánimos están muy caldeados en Bruselas, donde hoy se reúne el Eurogrupo, los ministros de economía de la Zona Euro, para dar detalles sobre ese rescate que la semana pasada no se concretó. Parece que Alemania, a pesar de las especulaciones sobre su liderazgo de un plan de ayuda junto con Francia, no está dispuesta a pagar los engaños que el gobierno griego ha infringido durante años para maquillar su economía.
La prensa germana asegura que Angela Merkel no quiere asumir el coste del rescate de Grecia por varios motivos. En primer lugar, hasta un 70% de los alemanes encuestados por el canal de televisión N24 se niega a ayudar a un país que, no solo no ha cumplido con sus compromisos, si no que ha ocultado sus problemas de díéficit durante años. Además, según el dominical Bild am Sonntag, un 53% de sus entrevistados va más lejos y cree que Grecia debería ser expulsada de la Zona Euro. En segundo lugar, los socios liberales de la canciller en el gobierno de coalición de Berlín aseguran que están hartos de que “Europa se construya cuando todos están de acuerdo y Alemania pagaâ€.
THE NEW YORK TIMES SEí‘ALA A GOLDMAN SACHS
El rotativo estadounidense asegura que tácticas empleadas por Wall Street similares a las que fomentaron la crisis de las subprime en Estados Unidos contribuyeron a agravar la crisis de Grecia y perjudicaron al Euro, dado que permitieron a gobiernos europeos ocultar su deuda. En concreto, NYT se refiere a una transacción promovida por Goldman Sachs que permitió a Atenas circunvalar los límites de deuda impuestos por Bruselas. El diario se basa en entrevistas, informes y documentos a los que ha tenido acceso.
“Incluso cuando la crisis fiscal de Grecia estaba en su punto álgido y en un punto de no retorno, bancos de Wall Street buscaban mecanismos para evitar que Bruselas hiciera preguntas. A principios de noviembre, tres meses antes de que Atenas se convirtiera en el epicentro de la crisis financiera, un equipo de Goldman Sachs llegó a la antigua ciudad con modernas propuestasâ€, afirma el periódico citando a dos personas que estuvieron en aquellos encuentros.
Goldman Sachs, presidido entonces por Gary Cohn, ayudó al gobierno griego a obtener un príéstamo multimillonario justo despuíés de que Grecia entrara en la Zona Euro en 2001. Este acuerdo fue enmascarado tras una transacción de divisas.