Usted empezó su carrera como una neurofisiologa tradicional. ¿Cómo se sintió al empezar a explorar la bioenergia y ver que cambiaba su visión del mundo?
De niña era una mística, pero lo bloqueíé, simplemente porque era demasiado difícil. El mundo no estaba preparado para mi intuición y mis insíghts, así como el hecho de que me atreviera a ver otras cosas. Como neurofisióloga había sido entrenada con los procedimientos estándar, y sabia todo lo que había que saber sobre el cerebro y los músculos. Creíamos que lo sabíamos todo. Entonces encontríé a un sanador de aura que me ayudó a devolverle la vida a un músculo enfermo de polio, algo que, en esa íépoca yo creía imposible; esto hace cerca de treinta años. Realmente tuve una conmoción cuando apareció el rolfing y fui testigo de cambios en el rendimiento que no podía describir fisiológicamente. Luego, estudie a bailarines que se ponían en trance, y descubrí algo que nunca había visto antes: un campo de energía. Fue en la primera conferencia sobre acupuntura en la Universidad de Stanford cuando, por primera vez, me di cuenta de que probablemente se trataba de ese campo de energía que yo estaba explorando. Intelectualmente, pasíé por una gran lucha interior para poder decir que si bien la fisiología y la neurología son muy importantes, no son la respuesta.
¿Quíé le dijeron en la Universidad de California sobre esto?
Me llamaron y me preguntaron: «¿Quíé hace usted en su laboratorio?» Respondí: «Trabajo en la frontera del conocimiento humano y quiero que ustedes me protejan». Y así lo hicieron, siempre.
¿Cuál es el futuro de la bioenergía? ¿Cómo puede seguir desarrollando su descubrimiento la ciencia?
Debemos hacer tres cosas. Primero, establecer un banco de datos del campo de energía de la gente a medida que crece, desde la infancia hasta la adultez. Segundo, debemos hacer un inventario de los campos de energía de las enfermedades -o sea, tenemos que estudiar lo que sucede con el campo cuando la gente es tratada mediante la imposición de manos, el tai chi, instrumentos elíéctricos, etc.-. Tercero, debemos estudiar los campos de la persona que intervienen en el tratamiento. Despuíés de todo eso, finalmente, podremos hacer lo que la medicina nunca pudo, o sea, decir:
«aquí está el mejor tratamiento y la mejor atención míédica para esta persona con esta enfermedad, basados en todas las energías involucradas». Será algo altamente específico y no existe hoy nada en la medicina que vaya tan lejos.
Un trabajo del doctor Larry Dossey afirma que el uso de la plegaria como medicina es muy prometedor. ¿Cómo se relaciona la plegaria con el campo bioenergíético?
La plegaria hace que el cuerpo enfermo de la persona entre en niveles de vibración más elevados, de modo que su campo se vuelve más poderoso y coherente. Si se identifica con precisión adónde va la energía de la plegaria, y el campo de esa persona es receptivo a esta clase de energía, en cierto nivel se tendrá una curación instantánea. La plegaria de una persona no se puede comparar en absoluto con la de toda una iglesia, o con la de una terapia grupal. Cuando usted tiene a toda una iglesia rezando, tendrá frecuencias más altas y una mayor amplitud. Es la misma diferencia que existe entre una pequeña tormenta de viento y un gran huracán.
Toda la información se encuentra en el campo. La mente puede descifrarla igual que un televisor decodifica las señales audiovisuales. La mente es el decodificador mas grande del mundo, si la dejamos decodificar y no nos confundimos con nuestra basura emocional. Lo más importante que estamos descubriendo sobre el origen de la anticoherencia en los campos es que está relacionado con las emociones. Las emociones organizan el campo, de modo que las emociones destructivas y disociadoras lo organizarán destructivamente.
¿No es esto un salto muy grande, viniendo del trabajo más científico que hace usted?
No, no lo es. Lo que digo es que cuando los campos de una persona son coherentes y su espectro es completo, ella tiene la capacidad de comprender información que no proviene de los sentidos. La información proviene del campo y el campo es información. Es un sentido más elevado que el cerebro. Y si una persona alcanza esa etapa con firmeza, puede hacer exactamente lo que yo hago.
¿Cuál es el mensaje principal de su libro Mi'nd Mastery Meditations?
La mayoría de los libros de meditación están para hacemos la vida un poquito más fácil, o para libramos del dolor. Este libro no. Este libro dice: «Si usted es dueño de su mente, puede cambiar las cosas y alcanzar su potencial más elevado». Enseña esto paso a paso.
Las sociedades, o ciertos períodos de la historia humana, ¿tienen tambiíén sus campos característicos?
Sí. Los campos tienen que ver con la manera en que la gente de ciertas culturas maneja sus emociones, En nuestra cultura la mayoría de los campos están muy reprimidos, porque no somos muy libres en lo emocional. hay culturas que fluyen con su entorno mucho mejor que la nuestra, como las orientales o las del sur del Pacífico. No logran lo que logramos nosotros porque no tienen el espectro completo, pero sí tienen vibraciones mas elevadas, y nosotros necesitamos eso. Aunque la agresividad de las culturas industrializadas es importante, la hemos exagerado y llevado demasiado lejos. Pero estamos cambiando. Puedo verlo cuando testeo los campos de la gente, ya que ahora se necesitan menos personas para crear un espectro completo. Creo que estamos viviendo un gran momento.