La recuperación iniciada hace dos semanas tras el susto de la deuda europea se afianzó la pasada con cuatro subidas consecutivas en Wall Street que lograron superar los primeros niveles de resistencia. Y ahora llega el momento decisivo, en el que los índices deben demostrar que aquel susto fue una mera corrección y que son capaces de retomar la tendencia alcista para atacar los máximos anteriores a aquella caída.
Este momento decisivo estará marcado esta semana por una serie de datos económicos de gran importancia, entre lo que sobresale la primera revisión del PIB del cuarto trimestre en EEUU, la confianza del consumidor y las ventas y precios de viviendas. Si estas cifras confirman que la economía está recuperando a un ritmo moderado, lo que permitiría a la Fed mantener los tipos ultrabajos actuales, lo normal es que el rally tenga continuidad.
El comportamiento de los demás activos la semana pasada tambiíén apunta en esa dirección. Así, los bonos rompieron a la baja en precio -al alza en rentabilidad- y es bien conocido que la bolsa y la deuda mantienen históricamente una correlación inversa. Asimismo, el dólar protagonizó una gran vuelta bajista (alcista para el euro) en zona de soporte clave, lo cual en teoría tambiíén es positivo para la renta variable.
Tambiíén abona la tesis alcista la capacidad de Wall Street de mantener su subida incluso el viernes, despuíés de que el jueves la Fed decidiera subir el tipo de descuento. Aunque la medida había sido preanunciada, los analistas la interpretan como el primer movimiento para la retirada de los estímulos extraordinarios y el colofón del inicio de las subidas del tipo oficial. La capacidad para subir ignorando las malas noticias tambiíén es un indicio de fortaleza.
Otros elementos relevantes de la semana serán la comparecencia de Bernanke en el Congreso (el miíércoles), la emisión de 126.000 millones en bonos y letras por parte del Tesoro de EEUU y los resultados de varios centros comerciales, como Home Depot, Target y Macy's tras la decepción de las cuentas de Wal-Mart conocidas la semana pasada.
La semana comenzará de forma suave, puesto que hoy no hay ningún dato en la agenda. Mañana martes comenzará el baile, con la confianza del consumidor -para la que se espera una ligera subida- y el índice Case-Shiller de precios de vivienda. El miíércoles llegarán las ventas de viviendas nuevas, con una previsión de que mantengan su senda de recuperación. El jueves tendremos las demandas semanales de subsidios y otro de los platos fuertes de la semana, los pedidos de bienes duraderos, con expectativas de aumento del 1,5%.
Pero el viernes será el día decisivo con la revisión del PIB. El consenso espera que el crecimiento trimestral se eleve al 5,9% desde el 5,7% inicialmente estimado. Tambiíén conoceremos ese día el PMI de Chicago, el índice de confianza de la Universidad de Michigan y las ventas de viviendas de segunda mano.