Sin prisa, pero sin pausa. Cajastur y Caja Murcia se han puesto a trabajar para liderar un proceso de integración al que tambiíén sumará Cantabria, Sa Nostra y, cuando se despeje su actual situación, Caixanova, para crear la tercera caja española por volumen de activos.
La entidad contaría con unos activos superiores a los 120.000 millones de euros, con los que desbancaría a Bancaja del tercer puesto del ranking español de cajas. Sin embargo, el proceso que ya está lo suficientemente maduro aún sigueestá pendiente del desenlace de las negociaciones entre el Gobierno y la Xunta de Galicia para desbloquear la integración de Caixanova en una alianza a la que aporta activos por 30.492 millones de euros.
Entretanto, el Grupo Cajastur (en el que tambiíén se incluye el Banco Liberta que, si se cumple el calendario previsto, asumirá el control pleno de CCM el 1 de julio) y Caja Murcia han tomado el liderazgo de una integración a la que tambiíén podrían sumarse otras cajas como la de Rioja, ante el incierto futuro del SIP en el que participa con CAI y la Insular de Canarias.
Según aseguran fuentes cercanas a la negociación, los contactos siempre han existido aunque en las últimas semanas habrían cobrado mayor intensidad. En este sentido, ayer el presidente de la entidad murciana reconocía en público conversaciones y explicaba que "sería una alianza con otras cajas con las que se está hablando, pero no hay nada todavía definido".
No tienen prisa
Pero dado los niveles de solvencia, de liquidez y de rentabilidad que poseen la mayoría de las entidades participantes en este proceso de integración, no existe la premura que se da en otros casos "por no tener ninguna necesidad imperiosa", según aseguraba ayer Egea.
Con el horizonte del 30 de junio sobre la mesa como fecha en la que tiene que estar concluida la reestructuración financiera en España, la hoja de ruta que diseñan Cajastur y Murcia tambiíén contaría con el beneplácito de la balear Sa Nostra, que acaba de renunciar a Banca Cívica -la unión de CAN y Caja Canarias que intenta retener a Burgos-, y de Caixanova, que encontraría en esta operación la vía de escape a la unión con Caixa Galicia que busca la Xunta.
Además, el planteamiento de Cajastur y Caja Murcia encaja con las declaraciones del presidente de Caja Cantabria, Enrique Ambrosio, que a principios de este mes tambiíén reconocía conversaciones con las otras cuatro cajas para crear un gran grupo financiero de más de 100.000 millones en activos.
Dos incógnitas
La operación contaría con sólo dos incógnitas: el desenlace del recurso presentado por el Gobierno ante el Tribunal sobre la ley de cajas gallega, que de ser retirado dificultaría la integración de Caixanova en este proyecto; y el íéxito de la integración de CCM en el Grupo Cajastur, que le permitiría desembarcar en este proyecto con un volumen de activos 42.481 millones de euros en total.
En este sentido, desde la entidad asturiana se felicitan por la marcha del proceso por el que se harán con el control de la manchega. En la actualidad han puesto en marcha el estudio para la segregación de los negocios y poder absorber sólo la actividad bancaria de CCM.
