Los consumidores estadounidenses tenderán a gastar con más cuidado incluso una vez que dejen de notar los efectos de la crisis económica, según muestra un estudio publicado hoy por la firma consultora Booz & Company.
Cuando la economía estadounidense haya dejado atrás la recesión, los consumidores no regresarán a la actitud “gastadora†que predominó en los primeros años de este siglo, sino que se mantendrán fieles a “la nueva austeridad†que, según los responsables del estudio, se ha afianzado como tendencia de consumo y tardará en disolverse.
“Muchos compradores consideran ahora la austeridad como un comportamiento de moda y esa tendencia no se alterará en los próximos añosâ€, explicó uno de los portavoces de Booz & Company, Matt Egol, al presentar ese informe, que indica que los estadounidenses son ahora además “unos consumidores más exigentesâ€.
El estudio destaca, por ejemplo, el aumento en el uso de cupones de descuento a la hora de comprar y señala que el 64 por ciento de las personas encuestadas se muestran decididas a acudir en el próximo año a establecimientos más alejados de sus residencias por el simple hecho de encontrar precios más bajos.
Los responsables de la muestra subrayan además que sólo el 32% de los encuestados espera que sus economías familiares mejoren en los próximos doce meses, lo que refuerza, a su juicio, las tendencias austeras a la hora de comprar, por ejemplo, sus marcas favoritas, que sólo adquirirán si están rebajadas.
El 65% de los participantes consideran además más importante ahorrar que gastar y el 55% aseguraron dar prioridad a encontrar buenos precios más que a hacerse con las mejores marcas.
El estudio de Booz & Company, en el que participaron dos mil consumidores de alrededor de Estados Unidos en octubre de 2009, muestra además que más de la mitad de los encuestados han disminuido el dinero que dedicaban a comer fuera de sus hogares (58%), a la compra de aparatos electrónicos (53%), ropa (53%) y a la industria del ocio y el entretenimiento (51%).
“Ante este nuevo ambiente de consumo, los vendedores necesitan acercarse de una manera diferente al consumidor para conseguir un mejor posicionamiento de sus productos, precios y estratíégicas publicitariasâ€, añadió Egol.
Este es el segundo estudio de consumo llevado a cabo por Booz & Company desde que estallara la crisis financiera en octubre de 2008 y, según la firma consultora, sus resultados muestran “una reducción dominante en el gasto de los consumidores que abarca un amplio abanico de productosâ€.
