Cambio radical. Al menos, con parte del pasado de luces y sombras más reciente. La otrora conocida como Avanzit presentó ayer su nuevo plan estratíégico para los próximos tres años. Aspiraciones renovadas bajo el nombre de Ezentis, cabecera con la que Mario Armero, escoltado por Josíé Luis Macho (Thesan Capital) y Santiago Benedit (director financiero), asume las riendas como presidente ejecutivo.
Un histórico valor de la bolsa, habitual de los rumores y de sonados inversores, hace borrón y cuenta nueva. Ayer martes, Armero se estrenó como primer ejecutivo de Ezentis. Una semana despuíés de ocupar el cargo, aunque su fichaje se fraguó durante los últimos tres meses, el ex responsable de General Electric para España descubrió los principales hitos de la compañía para 2012.
El primero y fundamental pasa por alcanzar unas ventas de 450 millones de euros para 2012, casi el triple de los 158 millones de 2009. Una proyección construida sobre el crecimiento orgánico que se genere en los negocios estratíégicos, que se concentrarán en los servicios desarrollados para los sectores de telecomunicaciones, infraestructuras, electrificación ferroviaria y renovables (solar).
Esto cuanto concierne al futuro. Respecto al pasado, Ezentis ha soltado lastre con la herencia de su último presidente y accionista de referencia, el inversor Javier Tallada. Como parte de la restructuración, Macho ha dado a Armero una compañía con las aventuras de Berggi y Navento totalmente provisionadas, mientras que el porcentaje en la productora Víértice (36%) ha sido considerado financiero a medio plazo.
Esta ruptura con el pasado ha provocado un saneamiento severo, con su inmediata repercusión en las cuentas de 2009, que arrojaron unas píérdidas de 47,7 millones de euros. Era parte de la cirugía necesaria. Ahora queda llevar la deuda hasta los niveles de 2006, en torno a los 35 millones, una cantidad asumible con las proyecciones de generación de caja y ebitda proyectadas para 2012.
Para dar este salto, Armero tiene el encargo de salir fuera. Ezentis se ha impuesto como objetivo alcanzar mayor volumen de contratación, hasta el 50% de su facturación, en mercados emergentes como Latam, sobre todo Colombia y Brasil, Oriente Medio y Norte de ífrica, así como la gestión de grandes cuentas, donde el gigante Telefónica ha ocupado históricamente un papel muy relevante.
Mientras el nuevo proyecto termina de encajar, Armero tendrá que jugar a un mismo tiempo con las variables de la reducción de costes y de la expansión internacional. Para estos tres años, además de Thesan, la antigua Avanzit cuenta con el respaldo institucional de la Junta de Andalucía, que se convirtió en accionista tras invertir seis millones de euros a cambio de llevar la sede social a Sevilla. Aunque no se descartan otros compañeros con los que compartir el viaje.
