EL EURO PERIFERICO
Está claro que la idea de que Grecia puede reducir el díéficit del 12 al 3% en dos años es un cuento para niños. Hay expertos que señalan que las alternativas son algún tipo de default o abandonar el euro, o inclusive las dos. De hecho ya se comentó hace años que las reglas del euro generaban una fisura irrecuperable entre algunos díéficits públicos de tipo crónico y que se recrudecerían en una hipotíética íépocas de vacas flacas. De hecho ya se habla abiertamente de que Grecia abandone el euro. Se justifica con la idea de que eso beneficiaría a todos: a Grecia para poder mejorar sus exportaciones tras una devaluación monetaria y a Europa le permitiría aliviar su difícil situación de seguir chupando de las tetas francoalemanas. En unos meses esa aportación creativa a que hacer con países en crisis y en posiciones de no retorno incluirá a otros. ¿Irlanda, Italia, España, Portugal? El miedo ya se ha perdido, ahora toca hablar de un nuevo elemento: el euro perifíérico.
Para que no se me pongan de dientes algunos lectores, diríé que lo del Euro Perifíérico es una idea que nos ronda a algunos economistas pero que no responde a una predicción. Es una aportación de tipo tíécnico que daría alguna explicación a diversas cábalas que se hacen en algunos entornos de debate financiero y monetario a los que tengo opción de asistir.
Ese Euro devaluado y territorialmente circunscrito a un espacio concreto en crisis aparecería en base a un plan de rescate de Grecia. Este podría consistir en expulsarla a fin que pudiera devaluar pero sin volver a su moneda antigua, el Dracma. Estaríamos hablando de un euro valor mixto que rondaría entre 1:1,2 o 1,3. De este modo la eurozona podría poner en cuarentena los países que entrasen en esa línea de difícil retorno sin devaluar costes y consumos. Serían de la Unión pero con imitaciones de tipo monetario. Es el conocido efecto billete de 50 euros cuya numeración empieza con una X o una V por ejemplo.
Supongo que me crujirán pero sigo pensando que España y otros que necesitarán políticas monetarias distintas no pueden mantenerse en el mismo modelo de cambio y que por ello es preciso dos Euros de tipología y valor dinámico. El riesgo más evidente a algo así es la retirada de depósitos de los entornos euro perifíérico (devaluado) y el riesgo de “corralito†allí donde eso fuera factible.
Para acompañar toda esta reflexión, os aporto varios recortes de lo que dicen algunos medios sobre Grecia. Fijaros que todo es demasiado correcto y excesivamente vinculado a un “rescate†costoso que Angela Merkel ya ha advertido que no está dispuesta a asumir en exclusiva. Pinta raro.