Hasta 'Foreign Policy', la revista de Solbes y un asesor de Zapatero, arremete contra el Gobierno
Redacción - 30/03/2010
Josíé Luis Rodríguez Zapatero ya no se salva ni del fuego amigo. La mala gestión del Gobierno, junto con la crisis económica y anímica que atraviesa España, ha multiplicado las críticas contra el líder socialista y su Ejecutivo. La edición española de Foreign Policy (FP), que dedica su último número la "depresión española", ha sido la última publicación en arremeter contra Zapatero. Lo relevante es que la revista pertenece a un ámbito cercano al PSOE que ya no teme expresar sus desavenencias con Moncloa.
FP está editada por la Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (FRIDE), cuyo Consejo preside el ex vicepresidente económico Pedro Solbes, y su ex director no es otro que Andríés Ortega, responsable de Análisis y Estudios de la Presidencia del Gobierno e hijo del fundador de El País, Josíé Ortega Spottorno. Además, el presidente del Patronato de FRIDE, Diego Hidalgo, fue cofundador y miembro del Consejo de Administración de PRISA, así como consejero de la Fundación Santillana y de Sogecable.
El sociólogo Josíé Antonio Gómez Yáñez analiza en la edición de abril y mayo “las causas de la desubicación que vive el país†en clave política y económica. “España se ha dejado llevar sin destino claro, con desidia, mecida por un crecimiento económico facilitado por el euro. Las reformas se han aplazado y, cuando se hacen imprescindibles, quienes tienen que hacerse cargo de ellas no transmiten la claridad de ideas, fuerza de carácter o determinación política para llevarlas al tíérminoâ€, señala.
Sobre Zapatero, asegura que “interpretó su victoria el 14 de marzo de 2004 en clave íépicaâ€, pero terminó la legislatura “obviando la inminencia de la crisisâ€. El sociólogo continúa con una áspera enumeración de la política gubernamental: “Ha virado hacia Washington por el simple influjo de la elección de Barack Obama; su ministro del Interior dirige una eficacísima política antiterrorista; del resultado de su política económica da cuenta la salida del Gobierno de Pedro Solbes; el Tribunal Constitucional está bloqueado en su decisión sobre el Estatuto de Cataluña, y algún miembro del CGPJ denuncia el nepotismo en la provisión de vacantes judicialesâ€.
Pero, para el articulista de Foreign Policy, “lo más desconcertante es su decisión de dar entrada en las decisiones relevantes a algunos estrambóticos personajes y partidos ajenos a la Transición. El sistema institucional del país está siendo llevado a un punto de dislocaciónâ€. Asimismo, critica con dureza el entramado burocrático que conforman las 17 comunidades autónomas, la imposición lingí¼ística y la “discusión domíéstica sin trascendencia más allá de nuestras fronteras, por cierto, cada vez más diluidasâ€.
Ningún medio de EEUU está acreditado en Moncloa
Por otra parte, la última edición de FP contiene una reflexión de Giles Tremlett, corresponsal en Madrid del diario británico The Guardian y del semanario The Economist, sobre la imagen de España en los medios internacionales. Tremlett reconoce “un escepticismo creciente sobre Zapatero en la prensa económica anglosajonaâ€, pero desmonta las “teorías de la conspiración†difundidas por Josíé Blanco y otros miembros del Gobierno sobre los supuestos ataques a España.
A su juicio, “pocas cosas han hecho más daño a la reputación del Gobierno español en la prensa internacional†que la investigación abierta por el Centro Nacional de Inteligencia para indagar quíé hay detrás de las críticas en medios anglosajones a la economía española. Según este corresponsal británico, detrás de los análisis negativos hacia la Presidencia europea de España se encuentra “el escaso perfil internacional de Zapatero, especialmente en Bruselas; las continuas acusaciones de ‘improvisación’ que hacían contra íél los medios españoles, y el hecho de que varios expertos en política exterior estaban muy dispuestos, en privado, a decir que el Gobierno estaba muy mal organizado para la Presidenciaâ€.
Pero, como señala Tremlett, el verdadero peligro no son las críticas, aunque provengan de un ámbito afín, sino que desaparezca el interíés hacia España. En la actualidad, ningún diario estadounidense está acreditado en Moncloa y los medios británicos tambiíén están perdiendo interíés. “A algunos quizá les guste. Al fin y al cabo, si no hay informaciones, no hay críticas. ¿Pero es mejor que piensen que el país no es importante?â€, se pregunta el periodista.
http://www.elconfidencial.com/elconfidente/foreign-policy-criticas-zapatero-20100330.html