Morgan Stanley y Goldman Sachs han sufrido con virulencia el estallido el estallido de la burbuja inmobiliaria a nivel mundial, que ha dejado 'heridos' de muerte a dos de sus fondos.
Si ayer trascendía que el fondo inmobiliario de Morgan Stanley afronta píérdidas por valor de 5.400 millones de dólares (3.950 millones de euros), la mayor en la historia de este sector financiero, hoy las informaciones apuntan a Whitehall Street International, otro fondo inmobiliario de Goldman Sachs, del que se habrían evaporado en torno a 1.800 millones de dólares.
Según informaba ayer The Wall Street Journal, el primero habría informado a sus inversores de que su fondo de 8.800 millones de dólares podría perder dos tercios de su valor, como resultado del estallido de la burbuja inmobiliaria y la consiguiente depreciación de activos.
En los últimos veinte años, la unidad inmobiliaria de este banco ha sido uno de los principales compradores de propiedades en todo el mundo, con operaciones valoradas en 174.000 millones de dólares desde 1991.
Las píérdidas, de acuerdo con documentos examinados por el diario, provendrían de las inversiones realizadas en la sede central del Banco Central Europeo en Fráncfort, en un gran proyecto de desarrollo en Tokio, y en la cadena europea de hoteles InterContinental.
Por su parte, el fondo de Goldman Sachs, que ha invertido en Estados Unidos, Alemania y Japón, ha visto reducida su cartera hasta 30 millones de dólares. Las informaciones del Financial Times apuntan a que el propio banco de inversión estaba invertido con 436 millones, conviritíéndose en el mayor accionista del mismo.