Aconseja al Gobierno que retrase la edad de jubilación para ayudar a reducir el elevado díéficit
· El organismo internacional mejora las previsiones sobre España, aunque siga en contracción el 2010
La depresión global se ha evitado, la economía mundial se recupera y lo hace a un ritmo incluso «mejor» de lo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) consideraba posible. El mensaje lo lanzó ayer Olivier Blanchard, analista jefe del organismo, al presentar la última edición del Informe de previsiones económicas.
El documento es una radiografía esperanzadora de la salud económica mundial, pero salpicada de advertencias sobre riesgos, especialmente los que representan la debilidad en el sector financiero y la preocupación sobre la deuda pública. «A corto plazo –alerta– existe el riesgo de que, si no se controlan, las preocupaciones de los mercados sobre la liquidez soberana y la solvencia en Grecia puedan convertirse en una verdadera y contagiosa crisis de deuda soberana». Habla tambiíén de una «incertidumbre inusual» en las perspectivas de actividad económica.
El giro respecto al año pasado, cuando la economía mundial se contrajo un 0,6%, es obvio. Si en enero el fondo proyectaba para este año un crecimiento global del 3,9%, el porcentaje sube en las últimas previsiones hasta el 4,2%.
Será una expansión desigual, una recuperación de múltiples velocidades, impulsada por economías emergentes, que crecerán hasta un 6,3%, lideradas por China e India.
RITMO DESPACIO / Las economías avanzadas se recuperarán más despacio, con una previsión de crecimiento del 2,3%. De estas, solo España acabará el año en contracción, pero los últimos cálculos del FMI, que sitúan el retroceso en un 0,4%, representan una mejoría de dos díécimas respecto a las estimaciones de enero.
El caso español es el que mejor expresa algunos problemas comunes de Europa, una de las zonas más golpeadas por la crisis y que está saliendo de la recesión a ritmo más lento, como constatan las recuperaciones moderadas de Alemania y Francia. Pero hay tambiíén profundas diferencias entre países europeos y España tiene particularidades que ayer llevaron al FMI a hacer recomendaciones específicas, como elevar la edad de jubilación «en línea con la esperanza de vida» para ayudar a reducir el díéficit fiscal.
Jorg Decressin, subdirector del Departamento de Análisis del FMI, identificó dos desafíos para España: lograr que la demanda externa se convierta en un impulsor de la economía mayor que la demanda domíéstica y el sector inmobiliario y reducir gradualmente el díéficit fiscal.
INTERVENCIí“N PíšBLICA / Igual que el FMI ha considerado la «extraordinaria intervención pública» a nivel global como la herramienta que eliminó el riesgo de una segunda gran depresión, Decressin defendió que el paquete de estímulo fiscal aprobado por el Gobierno español «fue el correcto» y le atribuyó una influencia «limitada» en el incremento de la deuda.
El FMI calcula que cuando acabe el 2010 la tasa de paro en España alcanzará el 19,4%, con una ligera recuperación en el 2011 que podría dejar el desempleo en el 18,7%.