Trabajadoras de Wal-Mart ganaron hoy un juicio histórico por discriminación de gíénero en el salario y en la promoción laboral, que podría poner a la empresa frente a la mayor demanda colectiva de la historia de EEUU, con más de un millón de reclamaciones.
El voto dividido entre seis jueces a favor y cinco en contra del juzgado de Apelaciones del Distrito Noveno de San Francisco, confirmó el rechazo a la apelación de la compañía en la mayor demanda sobre discriminación de gíénero en la historia de Estados Unidos.
El caso se remonta a 2001 cuando seis trabajadoras de la que es la mayor cadena de superficies comerciales presentaron una demanda ante un juzgado federal de San Francisco.
Su denuncia declaraba que Wal-Mart pagaba menos a las mujeres que a los hombres en el mismo tipo de trabajos y que sus empleadas recibían menos promociones y tenían que esperar más que los empleados para conseguirlas.
La empresa empezó una batalla legal para combatir la denuncia, pero perdió su apelación ya en dos ocasiones, primero en el juzgado federal y luego en 2007 en el juzgado de apelaciones.
Ese mismo juzgado volvió a abrir el juicio con un panel de jueces mayor -de tres pasó a once- y como respuesta a las argumentaciones de la compañía que pedía que las demandantes denunciasen por separado y no en conjunto.
"Aunque el tamaño de esta acción de clase es grande, el mero tamaño no se traduce en un caso incontrolable", declaró el juez Michael Daly Hawkins en la sentencia. EFE