No hay mal que por bien no venga, pensará el inversor multimillonario Warrent Buffet viendo la que está cayendo en Europa como consecuencia de la aguda crisis de deuda que atraviesa la Unión. El oráculo de Omaha no ha ocultado nunca su interíés por los posibles chollos que puede dejar una crisis, lo hizo con la financiera y lo está haciendo con esta nueva que ha estallado sin que todavía estuvieran cicatrizadas las heridas de la anterior.
La confirmación de lo que era un secreto a voces lo ha venido a confirmar el ‘ojeador’ del millonario en Europa. “Yo creo que Warren Buffet está ahora en la pantalla del radar de los empresarios europeosâ€, aseguraba en una entrevista en Bloomberg Angelo Moratti, el ejecutivo italiano que ayudó a Buffet a organizar su tour por el continente hace dos años. “Hace diez años no sabían quiíén era, hace tres años lo sabían pero no le comprendían. Ahora lo sabenâ€, afirmaba Moratti.
De esta manera, Buffet ya tiene el catalejo apuntando hacia Europa y Asia despuíés de que su brazo inversor, Berkshire Hathaway haya comprado este año la línea ferroviaria de EEUU por 27.000 millones de dólares. Según Moratti, hasta ahora Buffet había aparcado sus intenciones de comprar compañías europeas porque los vendedores no eran lo suficientemente grandes o porque tenían demasiada deuda. Sin embargo, ahora el inversor no se verá frenado por la crisis de la deuda griega ni por la caída del euro, según explica a Bloomberg.
“El no está interesado en el escenario macroeconómicoâ€, afirma Moratti. “Está buscando un negocio de tamaño considerable, con buenas perspectivas a largo plazo, bien gestionado y que salga por un precio justoâ€.
Además, la caída del euro frente al dólar no le ha podido venir mejor al oráculo de Omaha. En lo que va de año la moneda única ha caído más de un 13% e incluso se habla de paridad a finales de año y la fortaleza del dólar favorece la adquisición de compañías en Europa.
Por otro lado, Berkshire Hathaway, que no se libró de la sangría que supuso la crisis financiera, comienza a recuperar el brillo que tenía antes de 2008. El inicio de la recuperación en Estados Unidos ha permitido al brazo inversor del oráculo registrar un beneficio de 3.630 millones de dólares en el primer trimestre del año frente a las píérdidas de 1.530 millones del mismo periodo del año anterior.