El drástico recorte del gasto impuesto por el Gobierno a pensionistas, funcionarios y dependientes para calmar a los socios de la UE y a los mercados no afectará a la Alianza de Civilizaciones, el proyecto lanzado en 2004 por Josíé Luis Rodríguez Zapatero para tratar de salvar la brecha entre Occidente y el Islam, y que el PP y gran parte de la oposición parlamentaria desdeñan por considerarlo retórico y vacío de contenido.
El coste del proyecto es uno de los secretos mejor guardados en La Moncloa, que ha respondido con evasivas cada vez que la oposición metía el dedo en la llaga para saber cuánto ha costado hasta la fecha ese empeño personal de Zapatero, que este fin de semana, precisamente, asistirá en Río de Janeiro, acompañado del ministro de Asuntos Exteriores, Miguel íngel Moratinos, y de un nutrido síéquito oficial, al III Foro de la Alianza de Civilizaciones.
El pasado jueves, el mismo día en que el Consejo de Ministros aprobaba el tijeretazo para reducir el gasto público, el Gobierno daba tambiíén luz verde al II Plan Nacional para la Alianza de Civilizaciones, cuyo objetivo es "crear un espacio político que sirva para luchar contra la falta de entendimiento y de comunicación entre las culturas y las religiones". La aprobación de este plan ha pasado casi inadvertida, eclipsada por el fuerte impacto político y social de las medidas de ajuste para contener el díéficit, pero lo cierto es que Zapatero ha logrado blindar su Alianza de Civilizaciones contra el recorte del gasto.
La única limitación fijada por el Consejo de Ministros al II Plan Nacional para la Alianza de Civilizaciones, que abarca el periodo 2010-2014, es que "para el ejercicio 2010 no podrá suponer un aumento neto de gasto". Es decir: que, a diferencia de las pensiones, las infraestructuras, el sueldo de los funcionarios o las ayudas a las personas dependientes, el proyecto estrella de la política internacional de Zapatero se salvará de los recortes al menos durante este año.
La Moncloa guarda silencio
Pero, ¿cuánto ha gastado el Gobierno en este proyecto desde que fue lanzado en noviembre de 2004 por Zapatero? ¿Cuál es el presupuesto del II Plan Nacional para la Alianza de Civilizaciones aprobado la semana pasada por el Consejo de Ministros? La Moncloa guarda silencio. Lo único cierto es que la ejecución del plan afecta nada menos que a 10 ministerios (Asuntos Exteriores, Defensa, Educación, Ciencia y Tecnología, Igualdad, Interior, Justicia, Trabajo, Cultura y Política Territorial), y que el plan anterior (2008-2010) contenía hasta 58 actuaciones diferentes, desde la lucha contra la explotación laboral de los inmigrantes a la creación del Observatorio del Pluralismo Cultural y Religioso, pasando por la mejora de la convivencia en las escuelas o la restauración de la biblioteca de Sarajevo (Bosnia).
La opacidad el Gobierno ha quedado patente en el Congreso de los Diputados, donde se ha negado en repetidas ocasiones a facilitar a la oposición el importe de los recursos destinados a la Alianza de Civilizaciones. Durante la presente legislatura, diputados de PP y de CiU han formulado más de 20 preguntas al Ejecutivo para conocer los costes de las cumbres, la financiación del proyecto, el presupuesto para la cúpula de Naciones Unidas encargada al artista Miquel Barceló o los contenidos concretos de esta iniciativa personal de Zapatero. Muchas de estas cuestiones continúan pendientes o han recibido una respuesta vaga y geníérica, sin cifras del gasto real que supone para los Presupuestos Generales.
Por ejemplo, ante la insistencia de la diputada popular Dolors Nadal por averiguar los costes de la organización de los foros de la Alianza celebrados en Madrid (2008) y Estambul (2009), el Gobierno se limitó a responder que la ejecución presupuestaria depende de cada uno de los departamentos ministeriales implicados.
Carles Campuzano, diputado de CiU, llegó incluso a pedir amparo el pasado mes de marzo al presidente de la Cámara, Josíé Bono, ante la negativa del Gobierno a responder sobre la financiación de la Alianza. Entre otras cuestiones, Campuzano había reclamando en noviembre de 2009 el "importe de los recursos destinados" a este proyecto desde el año 2005. Pese a la obligación legal de contestar a todas las preguntas por escrito que planteen los diputados, el Gobierno continúa guardando silencio.
Lo que sí se sabe, por ejemplo, es que Asuntos Exteriores había gastado hasta el año pasado casi cinco millones de euros en la Alianza, a los que hay que sumar los 2,6 millones que costó el I Foro, celebrado en Madrid en enero de 2008, y los más de 7 millones invertidos en la restauración de la Sala de los Derechos Humanos y de la Alianza de Civilizaciones de la sede de la ONU en Ginebra (Suiza).
