Europa ve frustradas sus esperanzas y tendrá que digerir el cambio contable en España
Como empieza a ser habitual en este mercado, la recuperación del martes en Wall Street no tuvo ayer continuidad. Y eso que el mercado lo intentó, con una apertura con hueco alcista que hizo concebir esperanzas de que esta vez fuera la buena. Pero conforme avanzaba la sesión las fuerzas se agotaron y los índices acabaron en terreno negativo.
El Dow Jones volvió a perder los 10.000 puntos: cerró en 9.974 con un recorte del 0,69%. El Nasdaq se dejó el 0,68% y el S&P 500, el 0,57%.
Esta recaída, que se suma a la de ayer en Europa (el Ibex pasó de subir un 2% al 0,42%), hace temer una nueva sesión bajista en nuestro mercado, al menos en la apertura. Además, los inversores tendrán que digerir el cambio de la normativa contable de la banca anunciado ayer por el Banco de España y que reducirá su beneficio en una media del 10%.
De nuevo, el euro tuvo un papel preponderante en la sesión bursátil de ayer. Pese a mantenerse tranquilo por la mañana, en la sesión americana perdió los 1,22 dólares y provocó de nuevo las caídas de la renta variable.
Aparte, las ventas de viviendas nuevas en EEUU se dispararon el 15% en abril gracias a las ventajas fiscales, muy por encima de lo esperado. Los pedidos de bienes duraderos tambiíén superaron ampliamente las expectativas. Ambos datos dieron el impulso inicial a Wall Street, impulso que no pudo mantener hasta el cierre.
El petróleo recuperó con fuerza hasta 71,51 dólares y el oro superó los 1.200, para cerrar en 1.213,4. Los bonos cayeron en precio, con lo que su rentabilidad volvió al 3,24%.
Hoy jueves llegará el dato estrella de la semana, la primera revisión del PIB del primer trimestre para la que se espera un crecimiento del 3,3% frente al 3,2% inicialmente estimado. Tambiíén tendremos las demandas semanales de subsidios.