El brutal endurecimiento de las provisiones de la banca anunciado ayer por el Banco de España puede poner al menos a cuatro entidades al borde del colapso por el impacto que la nueva normativa puede tener en cus cuentas de resultados. Se trata de aquellas (todas ellas cajas de ahorros) que tienen mayor exposición al ladrillo y que sufren una mayor morosidad derivada de dicha exposición. Es decir, las que aparecen en la parte de arriba y a la derecha del gráfico adjunto.
En realidad hay cinco entidades en situación muy delicada (y pueden ser más, puesto que el cuadro se refiere al cierre de 2009), pero una de ellas es CajaSur, que ya había colasado y, tras su rechazo a fusionarse con Unicaja, tuvo que ser intervenida por el FROB en la madrugada del sábado. En el gráfico, el eje vertical es el ratio de morosidad del críédito a constructores y promotores, mientras que el horizontal representa el peso de este críédito sobre el total de cada entidad.
En un comunicado, el supervisor aseguraba ayer que, antes de aprobar estos cambios, ha evaluado su posible impacto en una muestra de entidades, comparando el nivel de provisiones estimado para 2010 antes y despuíés de la modificación normativa. El resultado es un incremento medio de las provisiones del 2% en 2010, lo que se traducirá en una caída del 10% del beneficio antes de impuestos en la actividad en España. Ahora bien, el Banco de España recalca que se trata de una media y que "los resultados son muy heterogíéneos entre entidades", lo que significa que habrá algunas a las que apenas les afecte y otras (las cuatro citadas) a las que puede hacer saltar por los aires.
Provisionar toda la morosidad en un año
Lo que anunció ayer el supervisor es la modificación de la circular contable 4/2004 para endurecer notablemente las provisiones que deben dotar las entidades por sus críéditos morosos, lo cual se traducirá en una caída del 10% del beneficio del sector, según estimaciones del propio Banco de España.
El principal cambio se refiere al calendario de provisiones: hasta ahora, existía un calendario "largo" en el cual los críéditos morosos con mejores garantías (hipotecas por menos del 80% del valor del inmueble) se provisionaban a lo largo de seis años; y un calendario "corto" para los críéditos con peores garantías (o directamente sin ellas), que se debían dotar en dos años. Pues bien, con la modificación de la circular desaparece el calendario largo y el corto se reduce a sólo 12 meses. Es decir, las entidades deberán apuntarse como píérdida todos los críéditos morosos en el plazo de un año.
"Al principio de la crisis, el 85% de la morosidad iba por el calendario corto, porque correspondí¬a al grueso de las inmobiliarias que entraron en concurso; ahora está en torno al 60%, ya que hay un porcentaje mayor de morosidad de particulares", explican en una entidad nacional. Eso significa que el impacto en los resultados de suprimir el calendario largo será mayor ahora, ya que un porcentaje mayor tendrá que pasar al corto, el único vigente a partir de la entrada en vigor de la nueva circular.
El último informe de estabilidad financiera del Banco de España cifraba en 42.800 millones de euros el críédito moroso de constructoras y promotoras en el conjunto del sistema. Para hacer frente a este riesgo, los bancos y cajas han dotado 17.700 millones, lo que supone una tasa de cobertura del 41,4%. A eso se añaden otros 59.000 millones con consideración de subestándar (no han incurrido en impago ni tampoco proceden de empresas en situación de alto riesgo), con unas provisiones de sólo 7.600 millones, el 12,9%.
Los "recortes" de MAFO
Ahora bien, el Banco de España ya había modificado en julio del año pasado los "criterios de interpretación" de la circular antigua, de forma que no hay que provisionar el 100% del importe del críédito moroso, sino sólo la diferencia entre dicho importe y el valor de tasación del inmueble hipotecado (o de la garantía de que se trate). Ahora se mantiene esta doctrina, pero el gobernador Fernández Ordóñez matiza esa 'prebenda' al aplicar unos "recortes" a ese valor de tasación. El efecto es que el importe que hay que provisionar es mayor que antes y además, como se ha dicho, en menos tiempo.
Estos recortes dependen de la dificultad para liquidar cada tipo de activo y de recuperar sus valor. Así, serán del 20% para primera residencia terminada, del 30% para fincas rústicas, oficinas y locales comerciales, del 40% para segunda residencia terminada o promociones sin vender y del 50% para el suelo edificable y las viviendas no terminadas.
Estos recortes tienen dos lecturas además de la necesidad de dotar mayores provisiones: por un lado, el gobernador Fernández Ordóñez reconoce implícitamente que las tasaciones de la banca no reflejan el valor real de los activos (como ha denunciado El Confidencial en varias ocasiones); por otro, tambiíén admite que el valor del suelo ha caído un 50% en España, y que la segunda residencia (normalmente en la costa) ha perdido un 40% de su valor. Unas cifras notablemente superiores a las estadísticas oficiales y privadas de evolución del precio de la vivienda.
Aumentan las provisiones para los ladrillos adjudicados
Respecto a los inmuebles que se han 'comido' bancos y cajas en pago de críéditos incobrables, la circular contable mantendrá el calendario de provisiones para . Es decir, habrá que dotar un 10% de ese valor en el momento de la adquisición y otro 10% cuando transcurran 12 meses. La novedad es que oficializa algo que ya conocía todo el mundo: que habrá que apuntar un 10% adicional (un 30% en total, por tanto) si el inmueble se mantiene dos años en balance.
Estos porcentajes se aplicarán sobre el más bajo de dos valores: el de tasación actualizado (menos los costes que implica su venta) o el valor del críédito original menos las provisiones que ya se hayan dotado por ese inmueble. Asimismo, si la el banco demuestra que el deterioro del valor no llega al 30%, se puede aplicar un porcentaje menor, según informa un portavoz del supervisor.
Con este aumento de provisiones para los ladrillos en el balance de las entidades, íéstas tendrán más incentivos para venderlos en mercado con un descuento mayor, ya que mantenerlos a la espera de que se recupere el mercado tendrá un coste cada vez mayor conforme vaya pasando el tiempo.
El citado informe de estabilidad cuantificaba en 59.700 millones los activos adjudicados en el total del sistema, de los que ha provisionado 13.000 millones, es decir, el 21,8%.
La nueva circular contable ha sido puesta a consulta pública para recibir los comentarios y sugerencias del sector antes de que el Banco de España apruebe la versión definitiva. Fuentes no oficiales del supervisor aseguran que la intención de MAFO es que este proceso sea muy corto y que la nueva norma pueda entrar en vigor incluso en un mes. En todo caso, cuando se apruebe bancos y cajas tendrán que revisar toda su cartera de críéditos de golpe y reflejar los nuevos criterios de provisiones en las cuentas de 2010.
