Golpe de efecto de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El Comitíé Ejecutivo del supervisor acordó ayer extender la obligación de comunicar las posiciones cortas (apuestas bajistas), hasta ahora restringidas a los valores financieros, a todas las empresas de la bolsa española, incluidas las cuotas participativas.
Era una reclamación que desde hace tiempo hacían muchas cotizadas, que pedían, por lo menos, poder saber quiíén apostaba contra su cotización.
El supervisor español adopta así la propuesta del Comitíé Europeo de Supervisores de Valores (CESR), que supone algunas variaciones respecto a los requisitos que se pedían ahora en España para las ventas a corto de los valores financieros.
Este cambio no supone de ningún modo alinearse con la decisión de Alemania, que ha prohibido las ventas a corto al descubierto (sin tener el subyacente) sobre valores alemanes, deuda y CDS. En España, las ventas a corto al descubierto en acciones no se han permitido nunca. Sí que se puede operar al descubierto en renta fija, pero la CNMV no ha detectado anomalías en la contratación y, por ahora, no se esperan cambios.
Con el acuerdo anunciado ayer, a partir del 10 de junio se tendrán que comunicar a la CNMV todas las posiciones cortas que excedan el 0,2% del capital de una compañía de la bolsa española (o saldo de cuotas), aunque no se harán públicas hasta que no superen el 0,5%.
Entonces se sabrá incluso la identidad del inversor bajista. Hasta ahora se comunicaban las ventas a corto cuando superaban el 0,25% del capital. Tambiíén habrá que comunicar al supervisor cuando se reduzca por debajo del 0,2% y cada vez que varíe una díécima de punto porcentual del capital emitido, al alza o a la baja.
Por otra parte, la CNMV ha acordado publicar, cada quince días, el saldo total (sin pormenorizar) de las posiciones cortas comunicadas y no publicadas, es decir, las que están entre el 0,2% y el 0,5%. El supervisor recuerda a los inversores con posiciones cortas superiores al 0,2% en la fecha de entrada en vigor del acuerdo que tendrán que remitir una comunicación adaptada al nuevo modelo.
Operativa
1. Las ventas a corto son apuestas bajistas con las que un inversor gana cuando cae la cotización de un activo, como las acciones.
2. Primero pide prestados los títulos que piensa que van a bajar y los vende. Cuando caen los recompra más baratos para devolverlos.
3. El beneficio se obtiene con la diferencia entre el precio de venta y el de compra, menos las comisiones.