Vueling y Spanair negocian la renovación de sus aviones
Un avión Airbus A320, modelo con el que muchas aerolíneas operan sus rutas de corto y medio radio, costaba hace dos años setenta millones de dólares (54 millones de euros).
El mismo aparato vale hoy la mitad. Este sustancial descuento se explica por la sobreoferta que hay actualmente en el mercado aíéreo, justo lo contrario de lo que sucedía antes de la crisis.
Y es que la coyuntura económica ha provocado una brusca caída de la demanda de billetes y las compañías aíéreas se han visto obligadas a reducir sus flotas o a cancelar pedidos de nuevas aeronaves. Dos de las compañías que se han visto en esta tesitura son Vueling y Spanair, ambas con sede en Barcelona.
Vueling y Clickair sumaban 47 aviones en 2007. La aerolínea surgida tras la fusión de ambas compañías cuenta ahora con 35 aeronaves. Spanair tenía en 2007 una flota de 63 aparatos. Los inversores catalanes que tomaron el 80,1% de la aerolínea en enero de 2009 siguieron con el proceso iniciado por la escandinava SAS y han reducido la flota de Spanair hasta los 36 aparatos actuales para tratar de ser rentables en 2011.
Tanto Vueling como Spanair ven ahora el momento de renegociar los contratos de sus aviones, ya sea revisando a la baja el precio del alquiler o leasing –aprovechando la sobreoferta existente– o incorporando aeronaves nuevas. En cualquier caso, es una oportunidad para reducir costes en un contexto de competencia feroz.