El presidente de Iberia, Antonio Vázquez, vaticinó ayer que la fusión con British Airways estará lista "en noviembre", y que ambas compañías conservarán sus marcas y "sus señas de identidad". Vázquez presidirá Internacional Airlines Group, nombre del que será el tercer grupo aíéreo europeo y sexto del mundo, con sede en Londres.
Vázquez, quien se mostró en contra de los planes del nuevo Ejecutivo británico de paralizar el proyecto de la tercera pista del aeropuerto londinense de Heathrow, subrayó que un aspecto importante del proceso será la gestión que British haga de su fondo de pensiones. í‰ste acumula un díéficit de unos 4.000 millones de euros, y se debe presentar una solución antes del 30 de junio.
El ex presidente de Altadis destacó que, a lo largo del año, la compañía ha dado ya un “importante impulso†al negocio conjunto de explotación en las rutas con British, y espera poder empezar las operaciones en la alianza atlántica que ambas buscan con American Airlines, pendiente de las últimas autorizaciones de competencia.
Cambio de modelo
Tras repasar en la junta general de accionistas las cifras de la compañía en 2009, cuando la compañía cosechó píérdidas de 273 millones de euros, Vázquez consideró “irrenunciable†el cambio de modelo en los vuelos de medio y corto radio. “En las condiciones actuales, no podemos competir con el bajo coste, y esto es algo que afecta tambiíén a las conexiones en el largo radioâ€, dijo el directivo, tras reincidir en que la compañía estudia el lanzamiento de una línea aíérea de bajo coste para estas rutas, al margen de su participada Vueling.
Sobre estos planes, el sindicato de pilotos Sepla propuso un modelo alternativo a la creación de una low cost “que ahorraría hasta tres veces más†y que pasa por el abaratamiento del sueldo de los pilotos, precisó Justo Peral, jefe de la sección sindical del Sepla en Iberia.
El presidente de Vueling, Josep Piquíé, recordó ayer en Barcelona que esta nueva aerolínea tendría su base operativa en el aeropuerto de Barajas y, por tanto, “no se solaparía con Vueling, que tiene su base en El Pratâ€. A propósito de la entrada de Ryanair en el aeropuerto barceloníés, el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez-Lozano, restó importancia al desembarco “de un competidor másâ€.
En cuanto a la evolución del negocio en 2010, Vázquez admitió que la nube de cenizas del volcán islandíés puso “cierto freno†a la tendencia de recuperación, en un trimestre en el que Iberia redujo casi a la mitad, un 44%, sus píérdidas, con un resultado negativo de 52 millones de euros, gracias a una menor factura del combustible y a sus medidas de contención de costes.
