Dos legisladores estadounidenses han acusado a General Motors (GM) de destruir documentos a raíz del inicio de varias investigaciones del Congreso sobre las actividades del fabricante de automóviles, informaron hoy medios locales.
El periódico The Detroit News en su edición digital señaló que los legisladores republicanos Darrell Issa y Jim Jordan enviaron ayer una carta al presidente y consejero delegado de GM, Ed Whitacre, en la que solicitaban que la empresa deje de destruir los documentos.
"A la luz de estas investigaciones, estamos muy preocupados al saber que GM está en un proceso continuo de destrucción de documentos relevantes a los esfuerzos de supervisión del Comitíé", señaló la carta obtenida por el rotativo.
Los dos congresistas se referían a investigaciones iniciadas despuíés de que GM iniciase una controvertida campaña publicitaria en la que presumía de haber pagado 6.700 millones de dólares prestados por las autoridades estadounidenses.
Pero la campaña publicitaria omitía que GM tambiíén ha recibido 43.000 millones de dólares en ayudas gubernamentales, cantidad por la que el Gobierno estadounidense posee el 61 por ciento de la empresa.
Una de las investigaciones del Comitíé de Supervisión y Reforma Gubernamental se refiere a la decisión de elegir las localidades para la instalación de nuevas plantas y otra a un supuesto "acuerdo secreto" para apoyar los esfuerzos del Gobierno estadounidense en la reducción del consumo de combustible de las flotas de automóviles.
La misiva de los legisladores se produce despuíés de que la abogada de GM, Lucy Clark Dougherty, declarase ante el comitíé del Congreso que la empresa destruye todas sus comunicaciones electrónicas 60 días despuíés de producirse y que no existen archivos de respaldo donde almacenar esos mensajes