El caos regulatorio convierte a las defensivas energíéticas en valores de alto riesgo
por Estefanía Fonseca
Invertia.com
Es la metamorfosis forzada que han sufrido grandes firmas del sector energíético español en apenas seis meses. Rumores e incertidumbre legislativa han acrecentado aún más los interrogantes que sobrevolaban a las utilities. Entre los últimos vaivenes, la supresión de la subida de la luz o el recorte de primas a la eólica hasta 2013. Algunos analistas como Nomura se preguntan si es posible confiar en que Industria pueda resolver la subida de las tarifas.
“Es un cacao, el sector está patas arriba y arroja muchas dudas de cara al inversorâ€, reconoce Miguel Sánchez, analista de Inverseguros. Una situación caótica que ha empezado a sembrar recelos en las valoraciones sobre el sector y en la gestión del Ejecutivo español. “La decisión de congelar la subida de la luz ha minado significativamente nuestra confianza en la determinación del ministro de Industria en este asunto ante las presiones políticasâ€, asevera Nomura en un informe.
Una medida que ya ha tenido su repercusión en la Bolsa. Al descuento de precios objetivos y recomendaciones de las cotizadas energíéticas de los últimos días, se suma tambiíén las rebajas en la perspectiva de las compañías. Moody´s lo como hizo ayer con la deuda a largo plazo de Iberdrola.
En la decisión de la agencia de calificación crediticia, ha pesado la congelación tarifaria y la disposición del Gobierno a abordar como parte de la negociación para el pacto de sobre energía una profunda revisión de los costes del sistema elíéctrico. "Estos movimientos elevan los riesgos regulatorios en el sector y podrían tener consecuencias negativas para las elíéctricas españolas", indica Moody´s en su nota.
Donde sí ha logrado Industria poner un primer parche es en las energías eólicas y termosolar. El viernes, Industria alcanzó un acuerdo con los representantes de ambos sectores por el que se recortarán las primas que reciben este tipo de tecnologías. La primera de ellas sufrirá una rebaja del 35% en las primas que reciben hasta el año 2013. Mientras que las plantas termosolares tendrán vetado el acceso a la opción de mercado más primas durante un año.
Medidas de tinte político
Para los expertos, este anuncio responde más a una medida de carácter político que una respuesta para el sector. “Es una solución corto placista que tendrá un impacto prácticamente nulo en las rentabilidades de los proyectosâ€, explica un analista que prefiere mantener el anonimato. Asimismo, indica que pese a que el recorte ha sido mayor del esperado, su carácter temporal es positivo ya que pasado ese plazo “se vuelve al escenario actualâ€.
“Hablamos de proyectos que tiene una vida útil de 20 años por lo que el hecho de que se recorte la prima sólo dos años, tendrá un impacto más limitado en los resultados y en la caja de las firmas durante ese periodoâ€, explica este analista. Desde Banca March creen que es positivo que el recorte de subvenciones tenga carácter temporal, aunque probablemente el inversor se situará en el peor escenario, es decir, la posibilidad de prórroga de dicho recorte en función de la situación de las finanzas públicas en 2013.
Dudas sobre cómo se va a reducir el díéficit
Con los 1.300 millones que el Ministerio prevíé ahorrar con la rebaja de las primas a la eólica y la termosolar, aún está por ver de dónde se recortarán de los 3.000 millones que se preveían de desfase de díéficit para este año. El consenso del mercado espera que el próximo tijeretazo recaigan sobre las fotovoltaicas, aunque los analistas discrepan en si serán mayores o menos que en la eólica. En cualquier caso, algunos expertos calculan que los recortes podrían llegar al 45%.
“El acuerdo alcanzado en renovables con eólica y termosolar entraba dentro de los razonableâ€, exponen desde el departamento de Análisis de Banco Sabadell. Sin embargo, recalcan que aún está pendiente saber cómo el Ministerio de Industria va a conseguir reducir el díéficit de tarifa. “Ahora parece cada vez más claro que los paganos serán los fotovoltaicos y seguimos teniendo dudas con respecto a la retribución de las hidro y las nuclearesâ€, aseveran en una nota. Esto último podría perjudicar a Iberdrola si se revisasen los windfall profits (excesos de retribución).
Dentro de la revisión del sector elíéctrico se busca tambiíén dar una compensación a los CCGT (ciclo combinado de Turbina de Gas) similar a la garantía de potencia para compensarlas de esta forma por no entrar en el pool cuando hay exceso de renovables. Algo que beneficiaría a Gas Natural e Iberdrola.
“Desde nuestro punto de vista, estas noticias son desalentadoras para un sector donde los riesgos regulatorios comienzan a ser importantesâ€, reseñan en BPI. Según datos de la entidad lusa, Endesa es la firma más expuesta al díéficit tarifario y por su mix de generación hidráulico y nuclear, por detrás estaría Iberdrola.
En relación con las elíéctricas tradicionales, en Banco Sabadell creen que si finalmente la revisión queda en esto visto en renovables, castigo a la fotovoltaica y sin tocar hidro y nuclear, “se seguirá generando díéficit y el alivio a corto plazo pasará a ser incertidumbre a largo plazoâ€.
“Las elíéctricas aún pasarán muchas dudasâ€, recalca Sánchez. A su juicio, una muestra de las incertidumbres son los altibajos que sufren las cotizaciones del sector ante las filtraciones informativas. “En cuanto hay algo de ruido, el mercado las penaliza y cuando las noticias son positivas no llegan a rebotar de la misma formaâ€.