La llegada de inmigrantes a los países ricos bajó durante la crisis económica global debido a una caída en la demanda de mano de obra, dijo el lunes la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
En el 2008, las 31 economías más desarrolladas que integran la OCDE recibieron 4,4 millones de inmigrantes, una baja de 6%, afirmó la entidad con sede en París en un informe.
La disminución revirtió los aumentos anuales promedio de 11% que la inmigración había registrado los anteriores cinco años, agregó. Además, las estadísticas nacionales apuntan hacia una nueva caída en la migración internacional en 2009.
El desempleo entre los inmigrantes masculinos fue mayor al de los nativos de los países receptores debido a que los extranjeros laboran en sectores que fueron azotados por la crisis como la construcción, hotelería y restaurantes, dijo la OCDE.