El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reconoció hoy que su país ha sacado más beneficios que Paraguay de la hidroelíéctrica conjunta de Itaipú al inaugurar el segundo tendido elíéctrico de esa central en este país.
En Itaipú, emplazada sobre el río Paraná y que abastece a grandes urbes y ricas zonas industriales de Brasil, incluida Sao Paulo, "el gran ganador hasta ahora fue Brasil, Paraguay utiliza poquísima energía", afirmó Lula en rueda de prensa conjunta con su homólogo de Paraguay, Fernando Lugo.
Ambos gobernantes comparecieron ante la prensa tras la puesta en marcha de las obras de un tendido elíéctrico en esta localidad de la región del Chaco, al norte de Asunción, en el acto central de la breve visita oficial de Lula a Paraguay.
La red de distribución, la segunda conectada a esa central en Paraguay, que tambiíén controla otra represa con Argentina, la de Yacyretá, al sur del mismo río fronterizo, tendrá un costo de 400 millones de dólares, que será financiado con recursos el Fondo de Convergencia Estructurales del Mercosur (Focem), que esos tres países integran con Uruguay.
La línea de transmisión, de 500 kilovatios, representa el doble del consumo de energía de Asunción y sus ciudades aledañas, indico Lula en su discurso durante el acto en que reafirmó el compromiso de su país con el acuerdo suscrito con Lugo hace poco más de un año, el 25 de julio de 2009 en Asunción.
Además de la red elíéctrica, el acuerdo, de 31 puntos, prevíé triplicar los 120 millones de dólares que actualmente recibe Paraguay por la venta a su socio de su excedente de la energía que no consume en Itaipú, a 330 kilómetros al este de Asunción.
En su día, la obra fue presentada en Paraguay como una aportación de Brasil, pero en mayo pasado, durante el anterior encuentro presidencial, se aclaró que será solventada por el Focem, en el que Brasil es el mayor donador.
Otros puntos del pacto, como la triplicación de las compensaciones que recibe Paraguay y la venta directa de este país de su excedente en el sistema brasileño, están sujetos a la aprobación en el Congreso brasileño.
En ese sentido, Lula dijo que la próxima semana entrará en votación en las comisiones del Senado y que en septiembre se completaría el proceso legislativo antes de terminar su mandato, a finales de este año.
"Espero que el próximo presidente mantenga la misma visión de integración que yo tengo", aseveró Lula, al hacer hincapiíé en que tambiíén esta muy avanzada la construcción del segundo puente en la frontera con Paraguay.
Este nuevo cruce fronterizo, que será financiado por Brasil, permitirá la descompresión del trafico de personas y de mercancías a travíés del Puente de la Amistad, que une la paraguaya Ciudad del Este con Foz do Iguazú, en el sureño estado brasileño de Paraná y donde tambiíén converge la frontera con Argentina.
"De aquí a poco tendremos a otra persona gobernando Brasil y espero transformar todos los focos de problemas de la frontera", apuntó Lula al referirse expresamente al contrabando y el tráfico de drogas, entre otros.
Por su parte, el gobernante paraguayo, cuyas reivindicaciones en Itaipú fueron eje de su campaña electoral hace dos años, destacó que mediante "el criterio de solidaridad se pueden llegar a soluciones verdaderas por encima de las pobrezas humanas".
En Paraguay, las negociaciones del Gobierno que se instaló en el poder en agosto de 2008 fueron duramente criticada por la oposición y la prensa local que consideran que Lula ha faltado a sus promesas, mientras que en Brasil el jefe de Estado es cuestionado por las concesiones al vecino país.