Por... TOM KRISHER
DETROIT -- Un año despuíés de recibir miles de millones de dólares del contribuyente de Estados Unidos para permanecer a flote, Chrysler se jacta todos los meses de sus ventas crecientes e insiste en que ha iniciado el camino de la recuperación.
Pero debajo de las cifras de facturación hay señales preocupantes para Chrysler. La empresa tiene todavía un largo camino por recorrer antes de estar otra vez verdaderamente saludable.
Cifras confidenciales obtenidas por The Associated Press indican que la mayor parte de los avances logrados por Chrysler este año procedieron de ventas a empresas de alquiler de vehículos, entidades gubernamentales y otras firmas, y no a los consumidores estadounidenses.
Muchos ciudadanos comunes no se han mostrado atraídos por la línea de autos y camionetas de la compañía.
El íéxito de Chrysler es esencial para el gobierno federal y el erario, que intentan recuperar los 15.000 millones de dólares prestados a la empresa en críéditos de emergencia.
Chrysler probablemente anunciará una píérdida neta cuando difunda el lunes sus resultados del segundo trimestre. Perdió 197 millones de dólares en el primero.
En total, las ventas de Chrysler en Estados Unidos subieron 12% entre enero y junio, en comparación con el mismo periodo del 2009. Pero las ventas a individuos, es decir al menudeo, cayeron 21%, según datos de la industria.
Las ventas minoristas son importantes porque generan mayores márgenes de utilidad que aquellas realizadas a empresas y otros compradores mayoristas, conocidos en la industria como consumidores de flotillas.
El director general de Chrysler, Sergio Marchionne, dijo que la empresa depende demasiado de sus ventas de flotillas. Sin embargo, Marchionne sabe que las ventas a individuos deben subir.
Pronosticó que las ventas minoristas ascenderán, a medida que los nuevos modelos llegan a las salas de exhibición.
"La parte de las flotillas será cada vez menos relevante. Pero es una parte importante del negocio", señaló a reporteros el mes pasado.
Chrysler no revela sus datos de ventas divididos por los diferentes grupos de compradores. Señala que sus ventas minoristas crecen lentamente entre un mes y otro.
La falta de entusiasmo por los vehículos y camionetas de Chrysler ejerce presión sobre sus distribuidores, que tratan de resistir mientras la compañía renueva sus modelos. Su única oferta nueva en este año es la rediseñada Jeep Grand Cherokee, aunque 16 modelos nuevos o actualizados surgirán pronto.
Aunque muchos concesionarios están contentos con la Jeep, dicen que necesitan nuevos productos más rápido. Mientras íéstos llegan, la automotriz tiene pocas opciones distintas que la de apoyarse en los compradores mayoristas, dijo Erich Merkle, presidente de la consultoría Autoconomy.com.
"Creo que, si estuviera en el lugar de Chrysler, yo tambiíén aprovecharía lo que tengo", señaló.
