Ahora que casi dos tercios de los hogares estadounidenses han cambiado sus televisores de cinescopio por aparatos de pantalla plana y alta definición, los fabricantes de TV tratan de atraer de vuelta a los consumidores con lo más nuevo: TV en 3-D.
A fin de vender tientan a los consumidores con agregados como lentes de 3-D y discos Blu-ray, así como descuentos y transmisiones especiales de eventos deportivos. Si todo sale como pronostican los analistas, dentro de cinco años los aparatos 3-D representarán la mitad de todas las ventas de televisores.
Hasta ahora, la TV 3-D acapara apenas 2.5% de las ventas de nuevos televisores en EE.UU., de acuerdo con sondeo de la empresa iSuppli durante el último trimestre. Riddhi Patel, director de servicios de iSuppli, señaló que 83% de los interrogados en el sondeo que habían comprado un aparato 3-D se reconocieron como “experimentadores tempraneros†—personas que gustan poseer la más reciente tecnología— y la mitad de ellos tenían un ingreso anual familiar de 100,000 dólares o más.
Un sondeo de Frank N. Magid Associates, empresa consultora de la industria del entretenimiento, muestra que 25% de los consumidores planea comprar un aparato con capacidad 3-D en los próximos 12 meses. (Entre hombres de 18 a 24 años la tasa es de casi 40%). Este optimismo no parece fuera de lugar. “Vemos una curva de adopción similar a la alta definiciónâ€, sostuvo Chris Fawcett, vicepresidente de negocios televisivos de Sony.
Los consumidores estadounidenses ya conocen la tecnología 3-D. Más de dos tercios ha visto una película 3-D en una sala de cine, de acuerdo con Magid Associates. Las tiendas de electrónicos y grandes detallistas como Costco muestran prominentemente los modelos 3-D.
Daniel Camin, un ingeniero de 23 años, observó un televisor 3-D en una tienda Best Buy de Los Angeles y dijo: “Tengo que admitir que es mejor de lo que había pensado. Honestamente, parece como si estuvieras en el cineâ€.
Empero, el precio es todavía una barrera. Cuando Camin vio el precio de una Panasonic de 50 pulgadas exclamó “¿Dos mil trescientos dólares? No estoy seguro de comprarme una. Si todas las cadenas transmitieran en 3-D, yo pagaría un extra, pero probablemente no más de 25%â€.
Por ahora, los aparatos 3-D cuestan 1,200 dólares más que los de pantalla plana 2-D, indicó Patel. Sin embargo, para 2014 iSuppli espera que los televisores 3-D cuesten sólo 325 dólares más que los de alta definición.
No obstante, aún quedan importantes gastos ocultos. Panasonic, Sony y Samsung cobran 150 dólares por cada par de lentes 3-D. Los lentes de marcas de TV distintas no son necesariamente compatibles. Además, para ver películas 3-D se requiere un reproductor 3-D Blu-ray, con un costo de 200 dólares por el modelo básico.
La industria reforzará sus anuncios a medida que se aproxime la temporada de compras navideña. La primera gran venta de otoño es en la segunda semana de septiembre, cuando Best Buy y otros detallistas patrocinen programas de ESPN en 3-D.
Aparte de los precios, los fabricantes todavía tienen que convencer a los consumidores de que la televisión en 3-D además de cómoda es segura.