La inversión pública en la industria petrolera mexicana suma un billón de pesos (76.923 millones de dólares) desde diciembre de 2006, fecha en la que entró la actual Administración, dijo hoy la ministra mexicana de Energía, Georgina Kessel.
"Representa un incremento de 98,8 por ciento en tíérminos reales respecto a lo ejercido entre enero de 2001 y junio de 2004", indicó en un comunicado de la Secretaría de Energía.
En rueda de prensa con motivo del IV Informe de Gobierno, Kessel calificó las políticas energíéticas del presidente Felipe Calderón como garantes de un sector "más competitivo, seguro y sustentable, para que continúe como una palanca de desarrollo".
Toda la industria petrolera del país está concentrada en una sola empresa estatal , Petróleos Mexicanos (Pemex), desde la nacionalización de este recurso en 1938. Los ingresos por esta causa suponen la tercera parte de las arcas públicas.
Entre los principales logros destacó la estabilización de la producción de crudo en 2,6 millones de barriles diarios y el avance de cinco puntos en la tasa de restitución de reservas probadas, donde se alcanzó un nivel del 77 por ciento.
En este sentido, la funcionaria subrayó que los activos de la zona de yacimientos Ku-Maloob-Zaap alcanzaron un máximo histórico, mientras que las explotaciones de Cantarell, la mayor reserva de crudo utilizada en Míéxico en los últimos 40 años, redujo su tasa de declinación mensual.
La producción de gas natural, por su parte, creció casi el 95%, respecto al año pasado.
Kessel destacó tambiíén el proyecto Etileno XXI de construcción de un complejo petroquímico, "el primero de gran magnitud en los últimos 30 años y uno de los más importantes de esta Administración, ya que representa una inversión estimada de 2.800 millones de dólares".
Permitirá reducir las importaciones de petroquímicos y generará casi 8.000 empleos durante la construcción y unos 3.000 en la fase de operación, aseguró
