Nueva York logró recomponer ayer la figura tras el contraataque bajista del martes. Retomó las subidas, que fueron notables en el caso del Nasdaq -del 0,9%-, aunque más modestas en los índices tradicionales: el Dow Jones sólo sumó el 0,45% y el S&P 500, el 0,64%. En todos los casos, cerraron lejos de los máximos del día.
Esta reacción es positiva y permite pensar que lo ocurrido el martes no fue más que una corrección lógica por la sobrecompra y que ahora el mercado está dispuesto a retomar las subidas. Pero para eso los alcistas deben lanzar su ataque, y cuanto antes, para confirmar la superación de resistencias.
De lo contrario, si la subida definitiva no se produce en breve, el mercado se volverá a estancar y al final los bajistas volverán a tener opciones, con lo que habremos asistido a la eníésima falsa ruptura de este mercado lateral que está haciendo de 2010 un año tan difícil para los inversores.
Las subidas de ayer tienen más míérito si tenemos en cuenta que la principal referencia del día, el Libro Beige de la Fed, aunque señaló que la economía sigue creciendo, advirtió de signos generalizados de desaceleración, cosa que no había dicho en los meses anteriores. Asimismo, el críédito al consumo se contrajo mucho más de lo previsto.
Sin embargo, el discurso de Obama en el que presentó su nuevo plan de estímulo devolvió las ganancias a Wall Street en el tramo final de la sesión. En cuanto a las empresas, la noticia positiva fue la mejora de rating de BP pese al desastre del Golfo de Míéxico, que hizo subir un 3% al valor.
El dólar subió frente al yen tras alcanzar mínimos de 15 años, pero cayó frente a un euro que retomó las subidas y se fue hasta 1,2722. El petróleo subió ligeramente hasta 74,67 y el oro cayó hasta 1.257,5. Los bonos cayeron en precio tras el rally de la víspera y su rentabilidad subió al 2,65%.
Hoy jueves tendremos como únicas referencias las demandas semanales de subsidios y la balanza comercial.