Ezentis sigue siendo Avanzit. Es decir, la compañía actual, rebautizada para su nueva singladura bajo el control del fondo Thesan Capital, sigue demostrando querencia por los problemas a los que antes acostumbraba la antigua cablera. Esta vez, el lío es entre accionistas. Ayer, uno de sus inversores más populares, el financiero Javier Tallada, informó a la CNMV del proceso de arbitraje iniciado en la Cámara de Comercio de Madrid contra sus socios mayoritarios por incumplimiento de los pactos parasociales de diciembre de 2008.
De momento, la información remitida por Tallada no especifica los motivos del arbitraje y simplemente alude “al incumplimiento del contrato de accionistas de Avanzit (Ezentis)â€. Según la documentación remitida a la CNMV en diciembre de 2008, entre los distintos puntos del contrato, el financiero madrileño y Thesan Capital unificaron su acción de voto, cuyo criterio era competencia exclusiva del fondo. Es decir, Tallada seguía como accionista y pasaba a segundo plano, cediendo el poder a los ‘rescatadores’, que habían adquirido un 15% de la compañía.
Según personas próximas al inversor, Tallada tiene constancia de operaciones de venta de acciones de Ezentis realizadas por parte de Thesan Capital. Este colocaciones habrían contribuido al desplome del precio de la acción, que desde la entrada del fondo ha pasado de estar por encima de 1,20 euros por título a tocar los 0,50, dando al traste, entre otras cosas, a la entrada de nuevos inversores, que habrían comprometido su llegada con la consecución de determinados niveles de capitalización.
Más allá de las decepciones bursátiles, la venta de acciones de Ezentis formaba parte de las “limitaciones generales†vinculadas al pacto de sindicación al que se sometieron Tallada y Thesan durante los próximos tres años, es decir, hasta finales de 2011. En sentido contrario, existía la posibilidad de variar sus participaciones siempre que se autorizaran entre ellos mismos y se cumplieran todas las condiciones que se daban, recogidas en el contrato, extremo al que alude el inversor madrileño para sustanciar su arbitraje contra el fondo.
Desde Thesan Capital, el fondo patrocinado por el banco japoníés Nomura, reconocen la existencia de algún tipo de diferencias con su socio, que se negó a firmar como consejero las últimas cuentas de Ezentis para mostrar su desacuerdo, aunque desconocen los verdaderos motivos alegadas para acudir al arbitraje. De hecho, el equipo de Santiago Corral y Josíé Luis Macho, máximos responsables del fondo, asegura que no han incumplido el pacto parasocial que les une como socios de referencia con Javier Tallada.
Tambiíén reconocen su sorpresa por la actuación de Tallada fuentes del consejo de administración. Sin conocer los motivos concretos, algunos vocales de Ezentis sospechan de las intenciones del inversor con esta comunicación, al que reconocen que se ha mantenido al margen de informaciones sensibles, hasta ser comunicadas por los conductos oficiales, para evitar posibles usos inapropiados. Si además, el precio de la acción ha sufrido una depreciación relevante, dejan entrever, su posición en la compañía puede ser incómoda.
Por otro lado, aunque las medidas iniciadas por Tallada tuvieron lugar el pasado mes de julio, el accionista de Ezentis (propietario de un 7,1% a travíés de la instrumental Rustraductus) no informó del proceso a la CNMV hasta ayer miíércoles, poco tiempo antes de que el próximo lunes 13 de septiembre la compañía celebre la Junta General Extraordinaria de Accionistas, en la que debe aprobarse, como primer punto del orden del día, la ampliación de capital no dineraria para comprar a la sociedad de infraestructuras valenciana Sedesa.