El Gobierno chino autorizó el ingreso de los primeros embarques de aceite de soja de Argentina, frenados desde abril pasado por trabas sanitarias impuestas por Pekín, informaron hoy fuentes oficiales argentinas.
"Tenemos la información de que están volviendo a autorizar los embarques argentinos de aceite de soja", aseguró el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, a la agencia estatal Tíélam.
Domínguez recordó que en la visita a China que realizó en julio pasado la presidenta argentina, Cristina Fernández, las autoridades del país asiático adelantaron que la autorización saldría cuando se conociera la fecha de llegada de un funcionario de primera línea a Argentina.
En ese sentido, precisó que el 12 de noviembre próximo llegará a Buenos Aires el ministro de Agricultura chino, Han Changfu, en el marco de lo acordado por ambos Gobiernos.
En sintonía con Domínguez, el subsecretario de Agricultura, Oscar Solís, confirmó la reanudación de las compras de aceite de soja argentino por parte de China.
Solís detalló que las cerealeras con filiales en ambas naciones ya están cerrando los respectivos contratos y que "prontamente" partirán los primeros envíos de soja argentina con destino a China.
Por las trabas sanitarias que impuso Pekín, India ha desplazado a China como el principal destino para el aceite de soja argentino.
Hasta la imposición de las barreras sanitarias, China era el primer mercado para el aceite de soja argentino, con un 46% del total de las ventas del país suramericano, el primer exportador mundial de este producto.
Ahora la participación china en las colocaciones de aceite de soja argentino es de apenas el 1% del total.
La disposición china, que rige desde el pasado 1 de abril, frenó la importación de aceites de soja que contuvieran más de cien partes por millón de residuos de hexano, un químico usado en la extracción de los aceites de semillas oleaginosas.
Sin embargo, en Buenos Aires la medida fue interpretada como una represalia a las resoluciones "antidumping" (contra la competencia desleal) impuestas por Argentina a importaciones de diversos tipos de productos chinos, como textiles y calzado.
Según datos oficiales, China es el tercer destino de las exportaciones de Argentina, detrás de Brasil y Chile.
Argentina exportó el año pasado a China por valor de 3.698 millones de dólares, con una caída interanual del 42%, mientras que sus importaciones desde el gigante asiático sumaron 4.823,1 millones de dólares, un 32% menos que en 2008.
Como resultado, Argentina registró en 2009 un díéficit de 1.125,1 millones de dólares en el comercio bilateral