La Reserva Federal está lista para tomar medidas adicionales para estimular la economía de Estados Unidos, según revelan las actas de su última reunión, celebrada el pasado 21 de septiembre.
Desde diciembre de 2008 la Reserva Federal ha mantenido por debajo del 0,25 por ciento la tasa de interíés de referencia en EE.UU., y ha volcado más de 1,5 billones de dólares en el sistema financiero para contrarrestar la depresión más profunda y prolongada en siete díécadas.
Las actas de la reunión muestran que los 12 miembros del Comitíé "querían dar más consideración al marco más eficaz para calibrar y comunicar cualquier paso adicional de estímulo".
Las actas proporcionan un poco más de detalle sobre las discusiones que hay en marcha para lanzar medidas adicionales de estímulo, pero sin especificar el volumen de cualquier compra adicional de activos por parte de la Reserva.
Desde esa reunión, la publicación de varios indicadores negativos sobre el empleo han alimentado la especulación de que el banco central comenzará pronto una segunda tanda de medidas no convencionales para reavivar la economía.
"Muchos de los participantes indicaron que si el crecimiento económico sigue siendo demasiado lento como para que haya progresos satisfactorios en la reducción del índice de desempleo, o si la inflación continúa estando por debajo de los niveles aceptables (para la Reserva), sería apropiado que haya un acomodo adicional de la política económica", indican las actas.
Entre las medidas que discutieron los miembros del Comitíé se cuentan las compras adicionales de activos de largo plazo del Tesoro y "posibles pasos que afecten las expectativas de inflación", añaden.
El comunicado emitido por el Comitíé al tíérmino de su reunión señaló que una inflación demasiado baja haría conveniente una política monetaria aún más generosa.
Las minutas indican que al aumentarse las expectativas de inflación las tasas reales de interíés a corto plazo serían más bajas y esto estimularía la economía