Los alcistas pierden parte del empuje mostrado esta mañana y el índice de referencia de la bolsa española se aleja de los 10.800 puntos aunque sigue cotizando con alzas que superan el 1%. A la espera de Wall Street, las cuentas de JP Morgan han batido las previsiones.
"Los alcistas podrían tratar, por eníésima vez, de dar un golpe de efecto consiguiendo romper resistencias que vienen frenando los ascensos durante estas últimas cinco semanas. Les hablamos de los 2.825 en el EuroStoxx 50 o los 10.900 en el Ibex 35 . Si lo consiguen todo apuntaría a que podría retomarse la tendencia alcista principal y que se abriría un potencial alcista que podría ser además de sensible sostenible en el tiempo", comentaban los analistas de Bolságora de Ecotrader.
En el mercado de divisas, el dólar vuelve a mostrar signos de debilidad: el euro está cerca de los 1,4 dólares de nuevo y se mantiene por debajo de 82 yenes. Las palabras de Axel Weber, presidente del Bundesbank y consejero del BCE, pidiendo la retirada de estímulos, impulsan a la moneda única.
El mercado parece que no reacciona a la temporada de resultados. Intel, al igual que Alcoa la semana pasada, ha batido las previsiones de los analistas, pero el entorno macroeconómico sigue dominando las mentes de los inversores.
Los parquíés europeos han fallado ya muchas veces a la hora de superar resistencias, y son la pieza que falta para que los alcistas tomen el mando definitivamente de la renta variable.