La banca pone la zancadilla a la bolsa
por Carmen Ramos en Expansión
El sector bancario sigue dando disgustos a las bolsas y a la vez sufriendo los deslices, por decirlo de manera suave, de unos pocos.
En esta ocasión, no han sido los test de estríés ni el cumplimiento de las condiciones de Basilea por parte de las entidades europeas el desencadenante de un nuevo escándalo en el mundo de las finanzas, sino la sospecha de que distintas entidades estadounidenses han cometido anomalías en los desahucios de vivienda por impago de las hipotecas. No hace falta recordar que la crisis financiera que estamos sufriendo tiene uno de sus orígenes en la concesión de hipotecas de alto riesgo, y en la facilidad con la que se dieron príéstamos para la adquisición de vivienda a los llamados clientes ninja, personas sin ingresos, sin empleo y sin propiedades. Es fácil entender que muchas hipotecas no han sido pagadas, de aquellos barros vinieron estos lodos, pero el problema actual es que se ha detectado que un buen número de bancos ha decomisado millones de viviendas de forma ilegal. Se estima que desde 2007 más de seis millones de viviendas han sido embargadas en Estados Unidos y todo apunta a que al menos 2,5 millones se ha efectuado de forma fraudulenta. Si en unos casos han sido firmados por programas de ordenador, en otros de manera mecánica y sólo comprobando si el nombre y el cargo estaban correctamente escritos y, en cualquiera de los casos, sin verificar que las deudas que reclamaba la entidad y los requerimientos se ajustaban a la legalidad.
Un nuevo escándalo, que ha llevado a los fiscales generales de 41 Estados a suspender todas las órdenes de desahucio en curso y ha frenado a todos los índices bursátiles. La euforia que se vivía en Wall Street, y en el resto de bolsas, por la decisión de la Reserva Federal de poner en marcha nuevas medidas de estímulo monetario, para animar a la economía, y unos resultados empresariales mejores de lo estimado, ha vuelto a tropezar con la banca. No es lógico que se castigue a las entidades europeas, máxime cuando ya se ha destapado el pastel, pero en tanto no se den a conocer nuevos datos positivos Wall Street andará cabizbajo. No vemos riesgo de correcciones significativas y los recortes de los valores sólidos pueden ser ocasión de compra.