La transición hacia la TDT (Televisión Digital Terrestre) en España podría ser mucho más cara de lo esperado. Según el grupo de satíélites europeo Astra, el Gobierno español gastará 1.000 millones de euros en utilizar el modelo terrestre, en lugar de los 12 que hubiera costado usando el sistema satelital.
España fue pionera a la hora de afrontar el apagón analógico. Bruselas puso como fecha límite 2012, pero el 2 de abril se dejó de emitir en el antiguo sistema, siendo la TDT la única forma de ver la televisión convencional.
Sin embargo, este proceso podría estar repleto de irregularidades que le estarían costando a las arcas del Estado muchos millones más de los esperados, según informa Mercados este domingo.
Contradicciones entre Abertis y Astra
Astra le ha enviado un informe a la CE, en el que refleja unos datos rotundos: España se verá obligada a invertir 1.000 millones de euros durante los próximos diez años para poder instaurar la TDT en las zonas rurales, mientras que el coste hubiera sido de únicamente 12 millones en caso de haber utilizado el satíélite como sistema de emisión.
Las sospechas no han llegado únicamente a las esferas europeas. La Comisión Nacional de Competencia ha multado a Abertis Telecom -empresa que más ha participado en el despliegue de la TDT-, por abuso de posición de dominio, además de tener abierto otro expediente sobre este asunto.
Abertis, por su parte, ha defendido la gestión del Gobierno en la transición digital. Asegura que el Ejecutivo gastará 300 millones en la próxima díécada, en lugar de los 450 o 550 millones que se habría tenido que gastar en caso de llevar la TDT a las zonas rurales por el sistema satelital.