Un tipo de interíés del 4,75 por ciento en CatalunyaCaixa, del 4,25 por ciento en el Banco Popular, del 4 por ciento en Caja Madrid... ¿y en ING Direct?
La entidad que tradicionalmente había liderado la guerra de los depósitos prepara ya su artillería para entrar a competir en un terreno que tiene vetado hasta el próximo año, fecha en la que tiene previsto devolver las ayudas que recibió del Estado holandíés.
La entidad, sin embargo, ha desplegado su fuerza comercial para evitar una fuga masiva de depósitos ¿Cómo? Ha levantado el telíéfono y llama uno por uno a sus clientes para entrevistarse personalmente con ellos. -"Hola, le llamamos de ING Direct. Nos gustaría mantener una entrevista con usted ¿cuándo le vendría bien?"-.
Así arranca el proceso que termina con el cliente en la sucursal frente a un asesor que se encarga de explicar que la nueva estrategia de ING Direct consiste en que el cliente sepa que, además del banco online, cuenta con una oficina física a la que puede acudir incluso los sábados.
Más sucursales
De hecho, la entidad acaba de anunciar que tiene previsto abrir 25 nuevas sucursales y llegar a finales de abril con un total de 65 oficinas abiertas a disposición del público.
Para ello, el popular banco naranja ampliará su plantilla en un centenar de personas. Su trabajo será retener a todos los clientes que crucen la puerta de sus oficinas.
Según aseguran fuentes próximas a la entidad, los asesores, que cuentan con amplia información tanto sobre la entidad como sobre el sistema financiero, tienen la misión de convencer al cliente de que la opción de ING Direct es la mejor que ahora mismo tienen sobre la mesa.
¿Y en depósitos? El asesor admite que la oferta del banco no es la más competitiva del mercado. Aunque ofrece una rentabilidad del 3,5 por ciento para dinero nuevo -sólo durante los cuatro primeros meses- la Cuenta Naranja apenas retribuye con el 1,2 por ciento superado el primer cuatrimestre. Pero esa situación va a cambiar ¿cuándo? El año que viene.
Según relatan fuentes próximas a la entidad, el asesor tiene el encargo de explicar que el banco ya ha devuelto la mayor parte de las ayudas que le dio el Gobierno holandíés y que el año próximo reintegrará lo que le falta.
Es entonces cuando el banco entrará en esa competencia a la que ahora no puede acceder por el veto que viene aparejado a las ayudas públicas. Sin embargo, el presidente del Grupo ING, Jan Hommen, únicamente adelantó que la intención es devolver el 50 por ciento que le resta de las ayudas, en torno a 5.000 millones de euros, antes de que finalice el año 2011.
