La Comisión Europea ha impuesto hoy una multa de casi 800 millones de euros a once compañías aíéreas -entre las que están British Airways y Air France-KLM- por pactar los precios de los servicios de carga entre 1999 y 2006. Lufthansa, que tambiíén participó en este acuerdo ilegal, se ha librado de la sanción por ser la primera aerolínea que delató la existencia del cartel.
"Es deplorable que tantas aerolíneas importantes coordinaran sus precios en detrimento de la actividad empresarial europea y los consumidores europeos", ha declarado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, en un comunicado. "Con la decisión de hoy, la Comisión está enviando un mensaje claro de que no tolerará la creación de carteles", ha añadido.
Las mayores multas corresponden a Air France (183 millones de euros), KLM (127 millones) y British Airways (104 millones).
No hay ninguna aerolínea española
El resto de aerolíneas sancionadas, entre las que no hay ninguna española, son Air Canadá (21 millones), Martinair (29 millones), Cargolux (80 millones), Japan Airlines (35,7 millones), LAN Chile (8,2 millones), Qantas (8,8 millones), SAS (70 millones), Cathay Pacific (57 millones) y Singapore Airlines (75 millones).
Los contactos para pactar los precios empezaron por los recargos por combustible. Las compañías condenadas acordaron imponer un recargo a tanto alzado por kilo a todos los envíos. Más tarde, los miembros del cártel ampliaron su cooperación introduciendo un recargo de seguridad y negándose a pagar una comisión sobre los recargos a sus clientes.
El objetivo de estos contactos fue asegurarse que todas las compañías implicadas aplicaban estos recargos y que los aumentos (o disminuciones) de los niveles de recargo se aplicaran íntegramente y sin excepción. Mediante el rechazo a pagar una comisión, las aerolíneas se aseguraron que los recargos no quedaban sujetos a la competencia mediante la concesión de descuentos a los clientes. "Tales prácticas incumplen las normas en materia de competencia de la UE", destacó el Ejecutivo comunitario.
No obstante, la Comisión ha retirado su acusación de acuerdos ilegales en el caso de otros dos recargos y en las tarifas de flete que había incluido en el pliego de cargos por falta de pruebas. Por la misma razón, el Ejecutivo comunitario ha retirado los cargos contra otras once aerolíneas y una empresa de asesoría que habían sido inicialmente acusadas.
Para fijar el nivel de las multas, la Comisión tuvo en cuenta las ventas de las empresas implicadas en el mercado afectado, la naturaleza muy grave de la infracción y su duración. Cinco compañías, cuya identidad Bruselas no ha desvelado, solicitaron un descuento alegando su incapacidad para pagar la multa. Sin embargo, ninguna de las solicitudes cumplía las condiciones para dicha reducción.