La hotelera Pontin's entra en administración judicial y pone en riesgo una deuda de 40 millones de libras contraída con el banco español.
Ana Patricia Botín ya tiene un reto inmediato cuando asuma las riendas de la filial británica de Santander en las próximas semanas: recuperar la máxima cantidad posible de los 40 millones de libras (47,2 millones de euros) prestados por el banco español a la empresa turística Pontin´s.
El pasado viernes, esta compañía entró en administración judicial al no poder afrontar el pago de sus deudas. Santander es el principal acreedor bancario en este proceso de insolvencia, ya que en 2008 financió la mayor parte de los 46 millones de libras que el empresario Graham Parr pagó para comprar Pontin´s, un grupo que posee cinco complejos turísticos en Inglaterra.
Aunque es un importe modesto, se trata del principal caso de morosidad que afronta Santander en Reino Unido, donde su negocio está centrado básicamente en la financiación de clientes individuales y familias. En los dos últimos años, la entidad ha empezado a crecer en el segmento de pequeñas y medianas empresas (pymes), como refleja el críédito otorgado a Pontin´s en 2008.
El juez ha encargado la administración de Pontin´s a KPMG. Esta firma prevíé mantener abiertos los centros turísticos mientras busca un comprador. Los rumores en la prensa británica indican que los interesados en la adquisición no pagarán más de 15 millones de libras.
Fuentes cercanas a Santander indican que la entidad esperará a la evolución de los acontecimientos para provisionar su críédito con Pontin´s. Hasta septiembre, Santander UK había provisionado un total de 535 millones de libras. El beneficio neto en esos nueve meses de la filial británica fue de 1.313 millones de libras.
Un error de cálculo con los turistas británicos
Graham Parr adquirió Pontin´s en marzo de 2008 con el objetivo de aprovechar la crisis económica y la depreciación de la libra para atraer clientes británicos que no pudieran afrontar unas vacaciones en el extranjero.
Su idea era reanimar unos hoteles que vivieron su íépoca dorada tras la Segunda Guerra Mundial, pero que desde los años 60 se vaciaron al empezar los británicos a ir a España. La realidad es que el aumento de visitantes a los hoteles de Pontin´s no ha sido suficiente para justificar el precio de la operación. Aun así, los expertos descartan una ola de impagos en empresas británicas; la economía ha crecido un 2,8% en el último año.
