Las bolsas de Asia comenzaron la semana animadas tras el anuncio del plan de rescate a Irlanda, pero el optimismo les ha durado poco y se han contagiado de las ventas vividas ayer en Europa y Estados Unidos. Los inversores internacionales vuelven a preocuparse por la situación de los países perifíéricos del Viejo Continente y en Asia preocupa, además, la creciente inflación China, que intensificará las medidas para frenarla.
El índice regional MSCI Asia Pacífico ha perdido un 1,4% en una jornada en la que la Bolsa de Tokio permanece cerrada por festivo. El Kospi surcoreano ha caído casi un 1% y en China, el Shanghai Composite se ha dejado un 2,6%