Por... JULIE PACE
WASHINGTON -- El presidente Barack Obama anunció el lunes el congelamiento durante dos años de los sueldos de los empleados federales y advirtió a la ciudadanía que la medida es la primera de muchas decisiones necesarias para reducir el creciente díéficit fiscal.
"La verdad dura es que poner este díéficit bajo control va a requerir algún sacrificio amplio, y que ese sacrificio deberá ser compartido por los empleados del gobierno federal", dijo Obama.
La congelación afectará a todos los empleados federales civiles, incluso quienes trabajan en el Departamento de Defensa, pero excluirá al personal militar.
La Casa Blanca dijo que la medida resultará en un ahorro de al menos 5.000 millones de dólares durante dos años, unos 28.000 millones de dólares en cinco años y más de 60.000 millones de dólares en 10 años.
Los salarios de los miembros del Congreso no se vieron afectados por la orden de Obama, pero los legisladores votaron en abril pasado para congelar su propio sueldo. Tanto la Cámara de Representantes como el Senado renunciaron a un aumento automático de 1.600 dólares anuales por costo de vida.
Los representantes y los senadores ahora reciben 174.000 dólares al año. Su último incremento salarial fue de 4.700 dolares al inicio de 2009.
El Congreso fijó la paga del presidente, de 400.000 dólares anuales, en enero de 2001. No ha cambiado desde entonces.
Aunque Obama dijo que la congelación salarial a los empleados federales era necesaria para darle a la nación una postura fiscal sólida, agregó que íél no tomó la decisión a la ligera.
"Esto no es sólo un elemento en un libro de contabilidad federal", dijo. "Se trata de las vidas de las personas", agregó.
El ahorro derivado de la congelación salarial representará apenas un pequeño paso en los esfuerzos del gobierno para reducir el díéficit presupuestario de Estados Unidos, de más de un billón de dólares, pero luego que los votantes expresaron su ira sobre los gastos de Washington durante las pasadas elecciones de medio mandato, incluso un gesto simbólico muestra que la Casa Blanca recibió el mensaje.
Los presidentes de la comisión bipartidista de Obama para el manejo del díéficit habían propuesto una congelación de tres años en los sueldos para la mayoría de los empleados federales como parte de su plan para reducir el creciente díéficit de la nación.
El informe final de la comisión será difundido esta semana.