Eso es lo que comienza a comentarse entre los analistas del parquíé neoyorquino. Y es que como indica la estadística, desde una perspectiva de política monetaria, el mejor periodo para las acciones se sitúa entre la última fase de descensos de tipos y la fase temprana de subidas.
El Dow Jones ha recuperado un 78% desde los mínimos de marzo de 2009 y parece que ese periodo dulce es en el que exactamente han estado las acciones en los últimos 21 meses.
El mercado parece descontar que este periodo finalizará en algún momento de 2011. Los inversores ya se muestran preocupados respecto a que una fortaleza económica incremente el riesgo de que la Reserva Federal sea menos acomodaticia. Esto provocaría que las buenas noticias macroeconómicas lleguen a ser malas para los mercados, un fenómeno que ya ha podido observarse con un mercado que reacciona tibiamente a los positivos últimos datos macroeconómicos.
¿Quíé podemos esperar entonces para 2011? Algunos analistas comentan que 2011 podría finalizar como 1994 o 2004 (+2,1% y +3,1%, respectivamente) cuando la economía se fortaleció lo bastante como para que la Fed comenzara a subir tipos.
La Fed ya se ha comprometido a mantener los tipos bajos durante un tiempo prolongado, y es probable que la Fed mantenga su política sin cambios en los próximos trimestres, pero sí que podría comenzar a indicarnos que las medidas no convencionales podrían modificarse (QE2 lanzada en noviembre).