Reino Unido se contrajo un 0,5% en el cuarto trimestre, sorprendiendo negativamente a los analistas, que esperaban un crecimiento del 0,5% tras el 0,8% del tercer trimestre.
El tíérminos interanuales, el PIB se incrementó un 1,7%, tambiíén muy por debajo de lo esperado, que era de un 2,6%.
La Oficina Nacional de Estadísticas culpa al mal tiempo, con el diciembre más frío en un siglo, y a la caída de la construcción. El crecimiento habría sido plano entre octubre en diciembre.