Por... JONATHAN FAHEY
NUEVA YORK -- Las empresas automotrices están decididas a iniciar la venta masiva de automóviles elíéctricos, lo cual genera una mezcla de entusiasmo y temor entre las firmas generadoras de energía.
Conectado directamente a un enchufe hogareño, un auto elíéctrico puede consumir tanto como una casa pequeña. Ante esto, compañías de electricidad en partes de California, Texas y Carolina del Norte tratan afanosamente de mejorar los transformadores y otro equipo en barrios en los que se espera que haya gran demanda del Nissan Leaf y el Chevrolet Volt.
La industria generadora de electricidad no había tenido una oportunidad tal de crecimiento desde que los equipos de aire acondicionado se diseminaron por Estados Unidos en los años 50 y 60. El año pasado, los estadounidenses se gastaron 325.000 millones de dólares en gasolina y las compañías de electricidad quisieran tener aunque sea una pequeña fracción de ese mercado.
Los principales obstáculos al uso en gran escala de los autos elíéctricos son el alto costo y las limitadas distancias que pueden recorrer con una carga, al menos hasta que se haya construido una vasta red de estaciones de carga. Pero los ejecutivos de las compañías de electricidad temen que las dificultades para mantener el servicio para la primera hornada de compradores - y sus vecinos - pudiera retrasar el crecimiento del sector.
"Uno no tiene una segunda oportunidad de hacer una primera impresión", dijo Mike Rowand, que está a cargo de planificación para vehículos elíéctricos en la compañía de electricidad Duke Energy.
Ejecutivos de automóviles dicen que es inevitables que las empresas elíéctricas enfrenten problemas al inicio. "Todos vamos a saber más en un par de años", dijo Mark Perry, director de planificación de productos para Nissan de Norteamíérica.
Los vehículos elíéctricos son alimentados por baterías grandes que son cargadas conectándolos a un enchufe convencional o a estaciones de carga. Además del Leaf y el Volt, en los próximos dos años Ford, Toyota y el resto de los fabricantes importantes de automóviles planean ofrecer tambiíén autos elíéctricos.
Gobiernos en el mundo están promoviendo la tecnología como una forma de reducir la dependencia del petróleo, reducir las emisiones de gases de invernadero y mejorar la calidad del aire. El Congreso está ofreciendo a los compradores de autos elíéctricos un críédito tributario de 7.500 dólares y algunas ciudades y estados ofrecen subsidios adicionales que pudieran totalizar 8.000 dólares. El Leaf tiene un precio de 33.000 dólares y el Volt se vende por 41.000 dólares.
Los autos elíéctricos no producen emisiones, pero la electricidad con la que son cargados es generada a base de combustibles fósiles como el petróleo y el gas natural. Aún así, los coches elíéctricos causan dos tercios menos emisiones de gases de invernadero que los autos de gasolina, dice el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales.
Recorrer 16.000 kilómetros (10.000 millas) con electricidad requerirá unos 2.500 kilovatios-hora, un incremento de 20% sobre el consumo de un hogar estadounidense promedio. A una tasa promedio de 11 centavos por kilovatio-hora, eso es 275 dólares por un año de combustible, equivalente a 70 centavos por galón (3,8 litros) de gasolina. La gasolina cuesta hoy más de 2 dólares el galón en Estados Unidos.
"Los vehículos elíéctricos tienen el potencial de transformar completamente nuestro sector", dijo David Owens, vicepresidente ejecutivo del Edison Electric Institute, un grupo del sector.
A nivel nacional, las empresas de electricidad tienen suficiente energía y plantas para cargar centenares de miles de autos elíéctricos. Pudieran surgir problemas antes de que muchos hayan sido vendidos, a causa de lo que los fabricantes de autos y las compañías de electricidad llaman "agrupamiento".
Se esperan concentraciones de vehículos elíéctricos en barrios en los que estados y municipalidades ofrecen buenos subsidios, el clima es moderado, porque las baterías rinden más en climas cálidos y en zonas de altos ingresos y con habitantes preocupados activamente por el ambiente.
Así que mientras que estados como Dakota del Norte y Montana pudieran tener pocos vehículos elíéctricos, ciudades californianas como Santa Mónica, Santa Bárbara y Monrovia pudieran ver varios de esos vehículos en una misma cuadra. SoCal Edison espera estar cargando 100.000 vehículos para el 2015. California se ha fijado un millón de vehículos elíéctricos para el 2020.
Progress Energy espera ver esos agrupamientos en Raleigh, Cary y Asheville, en Carolina del Norte; y alrededor de Orlando y Tampoa, en Florida. Duke Energy espera lo mismo en Charlotte e Indianapolis. Todo el territorio servido en Texas por Austin Energy seguramente va a ser un lugar con abundancia de vehículos elíéctricos.
Añdir uno o dos vehículos elíéctricos a un barrio puede ser como añadir otra casa, y eso puede poner presiones sobre el equipo que da servicio a esas casas. "Estamos hablando de duplicar la carga de una casa convencional", dijo Karl Rabago, que encabeza el programa de preparación para vehículos elíéctricos en Austin Energy.
Todo depende del tamaño de la batería y los rápido que es cargada.
Cuando es conectada a un enchufe común, la batería del auto elíéctrico consume 1.500 vatios. En comparación, un aire acondicionado de tamaño medio o un horno de microondas consumen unos 1.000.
Pero el auto puede ser cargado más rápidamente si se le conecta a una estación de carga hogareña. Los primeros Leafs y Volts pueden consumir 3.300 vatios y ambos productores de automóviles pudieran elevar la cifra a 6.600 muy pronto. El Tesla Roadster, un auto deportivo elíéctrico con una enorme batería, puede consumir 16.800 vatios. í‰se es el equivalente de 280 bombillas de 60 vatios.
Una casa media den el área de San Francisco que no necesite aire acondicionado pudiera consumir 3.000 vatios, a lo máximo.
Los transformadores que distribuyen la electricidad desde las redes hasta las casas a menudo están diseñados para lidiar con una decena. Una demanda adicional en un transformador de uno o dos vehículos podría recalentarlos y dejar una manzana sin luz.
Para lidiar con esos problemas potenciales, personal de las empresas de electricidad están compilando información de Nissan y Chevrolet, haciendo sondeos de consumidores y examinando los patrones de compra de autos híbridos como el Toyota Prius para tratar de predecir dónde pudieran verse las mayores concentraciones de compradores de autos elíéctricos y tomar medidas para evitar apagones.
Asimismo, las compañías esperan convencer a los automovilistas programar sus autos para cargarse tarde en la noche, cuando las tasas son más bajas y la mayoría de los aparatos electrodomíésticos están apagados.