Toca una semana muy complicada en los mercados despuíés del susto de la pasada provocado por el subidón del crudo debido a los acontecimientos en Libia. Y dado que las cosas continúan igual y que continuarán las revueltas, el barril puede seguir escalando posiciones en los próximos días, que pueden traernos la salida de Gadafi como ocurrió hace unas semanas con Mubarak.
Pero el petróleo no será la única amenaza que se cierna sobre las bolsas en los próximos días. El viernes se conocerá el paro de febrero en EEUU y, si sale malo, probablemente el mercado no perdonará despuíés de que el de enero (que fue malo) pasara desapercibido porque se interpretó como una anomalía a causa del mal tiempo.
Tambiíén habrá otras referencias económicas relevantes sobre el sector industrial en los próximos días.
Corrección necesaria
Así pues, se suman muchos elementos para justificar una corrección que, en todo caso, parecía necesaria despuíés de la fortísima subida de las últimas semanas. La cuestión es hasta dónde llegará y si pondrá en peligro niveles relevantes de soporte. Claro que, si las cosas se tranquilizan en Oriente Medio y los datos no salen malos,se podrá ver un repunte muy contundente.
Hoy lunes se difundirán las cifras de ingresos personales y gasto de consumo, el PMI de Chicago y las ventas pendientes de viviendas. El martes, el ISM industrial, para el que se espera una ligera caída hasta 60,5 puntos. El miíércoles publicarán sus resultados varios grandes almacenes como Costco Staples, y tambiíén el índice ADP de empleo privado.
El jueves será el día de las demandas semanales de subsidios y el ISM de servicios, así como los resultados de Heinz. Finalmente, el viernes llegará el esperadísimo dato de empleo, con una previsión de 180.000 nuevos puestos de trabajo, aunque se espera que la tasa de paro suba hasta el 9,1%.